NEUQUÉN (AN).- El 5 de abril de 2007 la foto del maestro Carlos Fuentealba agonizando en la Ruta 22 fue tapa de este diario con el título "Desalojo violento: agoniza un docente". Su autor, Leonardo Petricio, recuerda aquella imagen que recorrió el mundo como una de esas que lo marcaron para siempre.
Y explica por qué: "Me marcó desde el punto de vista humano. Imagínate, es ver morir a alguien delante tuyo... Después de eso me involucré en la lucha de pedido de justicia, porque fui testigo de la tragedia".
Contó, además, que el suceso lo impactó tanto que recién un año después pudo hablar con la compañera del maestro, Sandra Rodríguez. "Tenía como un bloqueo porque me paralizaba su dolor", apuntó.
-¿Ganar un premio con una foto de algo tan atroz puede generar cierta contradicción?
-Hay un momento, ante un suceso periodístico trágico, donde uno deja de ser reportero para ofrecer una ayuda humanitaria. Y más allá de la dureza de los hechos uno siempre lleva la cobertura periodística a la evaluación de los editores.