En un torneo de locos Boca dejó atrás todas las especulaciones, venció 3-1 a San Lorenzo, lo dejó fuera de la pelea y el martes se medirá con Tigre con las mayores chances de salir campeón.
La diferencia de dos goles sobre el equipo de Boedo, le otorgó a los de Carlos Ischia, conseguir una ventaja muy importante en una definición tan cerrada: hasta perdiendo por un gol, dará la vuelta olímpica.
Las malas: no podrán jugar Juan Román Riquelme y el colombiano Fabián Vargas, quienes llegaron al límite de amarillas.
Lucas Viatri, Rodrigo Palacio y Cristian Chávez marcaron los goles del triunfo "Xeneize", mientras que Santiago Solari descontó para San Lorenzo en un partido accidentado, en el que el Juan Forlín y Andrés Silvera chocaron y cayeron desmayados sobre el campo de juego en el primer tiempo debieron ser trasladados a una clínica. Luego se informó que están fuera de peligro.
El "Santo", que el miércoles le había ganado 2-1 a Tigre, quedó preso de sus propios nervios y no sólo no pudo repetir sus últimas actuaciones, sino que terminó con nueve jugadores por las expulsiones de Gastón Aguirre y Gonzalo Bergessio.
El partido comenzó con tensión y altas temperaturas, ya desde los primeros minutos comenzó a presionar Boca.
Un tiro libre de Riquelme y segundos después un disparo de zurda de Viatri pusieron a San Lorenzo contra las cuerdas.
Pero el plantel de Miguel Russo reaccionó y estuvo cerca de abrir el marcador en un par de oportunidades. Una de ellas fue con un cabezazo de Silvera que dos minutos después chocó su cabeza con la de Forlín y ambos quedaron tendidos en el piso.
El pánico se apoderó de todos los protagonistas cuando el defensor de Boca entró en convulsiones. Luego de los primeros auxilios dentro de la cancha, los dos fueron trasladados a diferentes nosocomios, donde se le realizaron todo tipo de estudios y comenzaron a recuperarse. (ver aparte)
Tras el susto el partido se reanudó con poco ritmo, hasta el final del primer tiempo cuando Viatri mandó a la red un tiro de esquina de Riquelme.
Sobre los 15 del complemento San Lorenzo encontró el empate con un remate del "Indiecito" Solari que le pasó entre las piernas a Javier García.
Con el correr de los minutos, el "Santo" fue convirtiéndose en un nudo de nervios y Boca lo aprovechó al máximo.
Metió una contra letal entre Dátolo, Riquelme y Palacio, que terminó con la definición de la "Joya". Con dos jugadores más Boca pudo estirar la diferencia y ponerse 3-1 con un remate desde afuera del área del "Pochi" Chávez.
El martes enfrentará a Tigre en cancha de Racing, desde las 19:30, con la tranquilidad de saber que hasta perdiendo por un gol de diferencia, será el campeón.
