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	Este es el auto incendiado. Pertenecía a Quiroga, la víctima fatal del enfrentamiento, que fue encontrado varias horas después en el canal.

25 DE MAYO (ACA).- La batalla sindical por sumar afiliados a uno u otro bando, superó esta vez todos los límites imaginados.

Un violento enfrentamiento entre gremios dejó como saldo un muerto, varios heridos y dos vehículos quemados en medio de lo que muchos calificaron una cacería.

La batalla campal comenzó alrededor de las 7 de la mañana de ayer en la rotonda del Puente Dique sobre la Ruta 151 y la Provincial 34 por donde se ingresa a la localidad de 25 de Mayo, en La Pampa.

Sindicalistas de la UOCRA de Mendoza cortaban la Ruta 151 al mismo tiempo que los petroleros mantenían una medida de fuerza en el yacimiento "El Corcovo". Los petroleros "bajaron" hasta el puente y se produjo un verdadero caos, donde abundaron armas de fuego y elementos contundentes con los que se golpearon. La violencia entre gremios es una constante desde hace meses, pero ni Nación ni la provincia de La Pampa hicieron mucho por evitarlo a pesar del pedido expreso del intendente David Bravo.

La razón del enfrentamiento es concretamente la disputa por sumar afiliados a uno u otro gremio, lo que en los hechos se traduce en abultados ingresos de dinero. Se estima que están en juego unos mil afiliados, cada uno de los cuales aporta entre 300 y 700 pesos por mes. (Ver aparte)

El secretario general del sindicato petrolero de Bahía Blanca, Gabriel Matarazzo, dijo que ninguna persona de su gremio estuvo en el lugar, a la vez que acusó al intendente Bravo de operar para el sindicato que lidera Guillermo Pereyra. También dijo que los neuquinos los emboscaron en el campo en el yacimiento "El Corcovo".

Guillermo Pereyra, titular de los petroleros de Neuquén y Río Negro, acusó al gremio bahiense.

El personal policial había trabajado intensamente durante toda la noche atendiendo tres accidentes de tránsito con lesionados leves y participando de un operativo cerrojo montado en la provincia por la fuga de un preso de una unidad carcelaria de Santa Rosa. Cuando la jornada parecía que terminaba, se produjo el choque de fuerzas de los gremios. De todos modos, el personal policial del que dispone esta localidad fue insuficiente para contener el conflicto a punto tal que ignorando la ley y la presencia policial, el sector se convirtió en un campo de batalla donde todo valía y donde nadie se privaba de exhibir armas de fuego con total impunidad.

Todo comenzó minutos después de las siete de la mañana, cuando un pequeño grupo de la UOCRA de Mendoza cortó la Ruta 151. Pasaron sólo algunos minutos para que aparecieran en escena varias decenas de personas del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro y Neuquén. A partir de allí el descontrol reinó en el lugar. "Apenas llegaron, agarraron a un muchacho a la orilla de la ruta enfrente de la estación de servicio del Automóvil Club Argentino y entre varios le dieron una terrible paliza. Después volcaron el auto y lo prendieron fuego, mientras le pegaban al que encontraban. Los que estaban cortando, corrían para todos lados tratando de escapar y los perseguían por la orilla del canal en camionetas y se escuchaban tiros", contó a este medio un playero de la estación de servicios que había ingresado a trabajar a las 6 de la mañana. El propietario del auto fue identificado como Ariel Quiroga, militante de Mendoza, la misma persona que apareció sin vida en el canal principal ayer al mediodía.

Quiroga había sido golpeado salvajemente. No se sabe si se tiró o lo tiraron al canal. Desde afuera un policía trató de sacarlo pero no pudo. Minutos después desapareció en las turbias aguas. En el hospital, de los internados uno tenía heridas serias en la cabeza -un fuerte golpe con algo contundente en la nuca- y fue derivado a un centro de mayor complejidad de La Pampa.

A unos 400 metros del lugar, la empresa Zille tiene una explotación agrícola. Orlando Ocampo había llegado a trabajar al alba como todos los días en su camioneta Chevrolet. Minutos después de que se desatara el conflicto, vieron que gente de a pie corría y se metió a esa propiedad.

"Atrás de ellos venían dos camionetas Chevrolet, una verde y una gris. Los muchachos que huían se escaparon por las plantaciones y de las dos chatas bajaron unas 20 personas y se las agarraron con mi camioneta con piedrazos y le prendieron fuego después de robarse algunas cosas mías que había adentro. Nosotros les gritábamos que no teníamos nada que ver, pero no nos hicieron caso", contó Ocampo.

A las 8 de la mañana ya no había nadie en la ruta. Sólo los jefes policiales reunidos en el puesto caminero y el personal buscando el cuerpo de una persona que había desaparecido en las aguas. A esa hora también ya había 14 personas detenidas, todos del sindicato petrolero que comanda Guillermo Pereryra.

A partir de allí comenzaban a cruzarse las culpas. Mientras Pereyra salía a hacer declaraciones radiales recordando las constantes provocaciones tanto del sindicato de Bahía Blanca como de la UOCRA de Mendoza, Gabriel Matarazzo, mandamás del gremio bahiense charlaba telefónicamente con este diario despegando a su sindicato del conflicto.

"Nos están involucrando en un enfrentamiento en el que no había un solo afiliados nuestro, a pesar de que alguno podía haber quedado atrapado ya que es la hora en la que van a trabajar. Pero esta confusión es producto de la irresponsabilidad del intendente David Bravo que nos adjudicó un problema en el que no estuvimos. Pero lo hace por defender al otro sindicato que es el que la financió la campaña para intendente. Pero la gente de Pereyra produjo una emboscada en El Corcovo adonde llegaron el miércoles por la noche con unas 40 camionetas a tomar el lugar en el que hay afiliados nuestros" expresó. Pasado el mediodía apareció el cuerpo sin vida de Quiroga en el canal.

En la comisaría de 25 de Mayo además de los referentes del gremio petrolero había camionetas secuestradas. En la caja de una de ellas, se encontraban unos 15 palos del largo de un bate de béisbol aunque más gruesos y rústicos que no estaban precintados y que -tal vez- sean una prueba más de cómo se "discuten" las cuestiones gremiales en la zona. Tampoco había hasta ayer a la tarde, armas secuestradas.

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