SAN MIGUEL DE TUCUMÁN.- La lectura de la condena a prisión perpetua a los generales Antonio Domingo Bussi y Luciano Benjamín Menéndez desató la protesta inmediata fuera del juzgado y se produjeron serios incidentes entre los manifestantes y la Gendarmería.
Los manifestantes esperaban que el tribunal dispusiera que la pena se cumpliera en una cárcel común. Sin embargo, los jueces pospusieron esa decisión hasta el 4 de setiembre.
Los militantes lanzaron elementos contundentes contra integrantes de la Gendarmería Nacional y vidrieras de comercios e inmuebles adyacentes, mientras los gendarmes replicaron con gases lacrimógenos.
En tanto, dentro de la sala de audiencias el diputado nacional Gerónimo Vargas Aignasse, hijo de la víctima de la dictadura, se abrazó con familiares mientras sostenía una foto de su padre.
Randazzo pide "cárcel común"
El ministro del Interior, Florencio Randazzo, celebró hoy la condena a prisión perpetua impuesta a los ex militares Antonio Bussi y Luciano Menéndez, pero reclamó que cumplan las penas en cárceles comunes "sin ningún privilegio".
El fallo "es un paso importante en la lucha por la memoria, la verdad y la justicia que debemos sostener en la Argentina para construir un país con futuro", dijo Randazzo en un comunicado.
"Tenemos la plena convicción que la construcción colectiva que debemos hacer los argentinos debe borrar la impunidad para siempre y que la justicia llegue siempre es vital para que no se repitan las tragedias que azotaron a nuestro pueblo", enfatizó.
Pero al mismo tiempo advirtió que "con el respeto que se merecen las decisiones que tome la justicia, creemos que quienes fueron juzgados deben purgar sus condenas en cárceles comunes sin ningún privilegio como ya lo han hecho otros tribunales del país".