Para la mayoría fue una sorpresa, pero la dupla Juan Curuchet-Walter Pérez venía dando buenos indicios de que podía ser candidata firme en la prueba Americana. Es que en el 2004 fue campeona mundial en la especialidad, mientras que en los últimos Panamericanos de Río de Janeiro también subieron a lo más alto del podio.
Ya con el oro colgado de cuello, Pérez, de 33 años, agradeció a su madre que "ayudó desde el cielo" y contó cuál fue la clave del épico triunfo: "Dimos el primer golpe y nos mantuvimos hasta el final". Argentina siempre se mantuvo dentro del primer pelotón y rápidamente le sacó una vuelta de ventaja a la mayoría de los equipos, como Italia, Bélgica -que ganó varios embalajes y sumó la mayor cantidad de puntos, con 17- y Alemania.
Curuchet-Pérez manejó la carrera con inteligencia, en el tercer sprint obtuvo los primeros cinco puntos y, a partir de allí, no abandonó nunca más el liderazgo, hasta subirse al podio.
El duelo principal se dio con España, que conformó un equipo de gran nivel con Joan Llaneras y Antonio Tauler, quienes finalmente se quedaron con la medalla de plata, y Rusia, con Mikhail Ignatyev y Alexei Markov, que recibió la de bronce.