NEUQUÉN (AN)- La abogada Graciela Demiz pidió la remoción "por mal desempeño" del consejero Gustavo Olivera, quien la calificó con "cero" en el concurso para ser jueza de la Cámara de San Martín de los Andes, cuyo resultado además impugnó.
Otro de los postulantes que recibió la misma calificación por parte de ese consejero, el camarista Eduardo Sagües, también presentó una impugnación.
Si el Consejo de la Magistratura hace lugar al planteo de Demiz, Olivera -quien representa al bloque legislativo del partido justicialista- será suspendido en el cargo hasta que se resuelva su situación.
El Consejo es juez de sus propios miembros. La admisibilidad o no de las denuncias y las destituciones se resuelven con cinco votos. El total de integrantes es siete.
La embestida contra el organismo, creado por la reforma constitucional de 2006, tiene otro frente: dirigentes de la Asociación de Magistrados pidieron una audiencia con el gobernador Jorge Sapag para trasmitirle su rechazo al método de selección y pedirle que impulse una enmienda constitucional. Desde el Poder Ejecutivo los mandaron a hablar con los representantes del MPN en el Consejo, pero no aceptaron esos interlocutores.
Los cuestionamientos contra el Consejo de la Magistratura recobraron fuerza luego de conocerse el resultado del concurso para elegir tres jueces destinados a la Cámara de Todos los Fueros de San Martín de los Andes. El primer lugar en el orden de mérito lo obtuvo María Julia Barrese; segundo fue Andrés Arla y tercero Juan Gago.
La polémica fue porque otros candidatos con expectativas quedaron rezagados debido a que en la entrevista personal (una de las tres instancias de evaluación) recibieron bajo puntaje.
En el caso de Demiz, planteó su disconformidad mediante un escrito con el cual impugnó el resultado del concurso y solicitó la remoción del consejero Olivera. Los fundamentos no fueron hechos públicos.
Sagües, por su parte, también impugnó el resultado. Es otro de los que fue calificado con "cero" por Olivera.
El tercer "cero" que puso el consejero fue para Arla, quien sin embargo igual entró entre los tres primeros.
Otro detalle curioso que arrojó el concurso está relacionado con el puntaje del juez Gago: a último momento y en respuesta a una impugnación, el representante del Tribunal Superior de Justicia en el Consejo, Felipe Cía, le asignó 2,25 puntos más por sus antecedentes. Gracias a eso mejoró el promedio.
Las impugnaciones y el pedido de remoción serán tratados la semana próxima. Si la resolución no conforma a quienes los presentaron, podrán recurrir a la vía judicial. Pero mientras tanto continuará el proceso de designación de los camaristas, cuyos pliegos irán a la Legislatura para recibir (o no) el respectivo acuerdo.