NEUQUÉN (AN).- "En un contexto de definir un Tribunal Superior ideal, lo primero es que los miembros deberían ser, aunque parezca una obviedad, personas intachables". Así resumió Rusconi la cualidad esencial que se debe esperar de los miembros de la Justicia y, particularmente, de la nueva conformación del TSJ neuquino, que deberá renovarse tras las renuncias las renuncias de Jorge Sommariva y Roberto Fernández y de la reciente destitución de Eduardo Badano.
El especialista destacó la "honorabilidad" como el aspecto indispensable. Luego, una alta formación intelectual y variedad en las distintas especialidades del derecho. Opinó que, "incluso cuando se esté ubicado en sectores políticos diversos, habría que lograr que los que son enemigos ideológicos o políticos reconozcan que el vocal es una persona de alta honorabilidad". Y aclaró que "si desde la cúspide no se envía ese mensaje de honorabilidad, no se le puede pedir a la comunidad que crea en la Justicia".
Para Rusconi, el segundo requisito es "una alta formación intelectual", ya que "el tribunal no sólo ejerce su influencia sobre los tribunales inferiores sino también por la calidad de sus decisiones judiciales".
"Por último creo que tiene que haber una representación no monolítica", explicó respecto de la última conformación del TSJ neuquino, con supremacía de penalistas.