NEUQUÉN (AN).- Las declaraciones del juez federal Guillermo Labate y del gobernador Jorge Sapag, aclarando que en caso de ser confirmado el magistrado se sumaría al TSJ recién en dos meses, retumbaron en los pasillos de la Legislatura. La mayoría de los diputados lo apoya para el cargo, pero ayer surgieron dudas debido a la urgencia con la que se tienen que cubrir las vacantes en el máximo tribunal de la provincia.
En la comisión de Asuntos Constitucionales se aprobó por unanimidad el despacho para que el tema sea debatido mañana en la Cámara. No obstante, las dudas surgieron al momento de expresar los posicionamientos de los bloques respecto del apoyo que necesitaría el candidato para ser confirmado como vocal. Es que a diferencia de otras decisiones que se han tomado en la Legislatura, para la designación de de los integrantes del TSJ se necesita una mayoría especial de dos tercios de los votos y no alcanza con el oficialismo.
El diputado de Opción Federal y aliado al gobierno Horacio Rachid manifestó su "preocupación" por las intenciones de Labate de culminar con la etapa de instrucción en el juicio que investiga crímenes cometidos durante la última dictadura militar, lo que implicaría una demora para asumir en el TSJ de al menos dos meses. "No me gustaría que la designación fuese un cargo periférico o secundario al que actualmente ocupa", indicó Rachid, que de todas maneras no anticipó su voto.
Para el presidente del bloque del MPN, José Russo, que el juez haya dejado expresa su posición de mantenerse al frente del juicio "habla de su responsabilidad ética y moral". "Me parece absolutamente razonable", indicó Russo, que propuso a la comisión -y esta aprobó- requerir una aclaración al juez, "aunque sea una reunión o conversación telefónica".
"¡Por Dios si es un avance!", exclamó Marcelo Inaudi (UCR) respecto de la posibilidad de que sea Labate quien reemplace al renunciante Roberto Fernández en el tribunal. El diputado de la Concertación incluso destacó que comparte los motivos de Labate para mantenerse al frente del juicio a los militares, pero dejó en claro las urgencias de la justicia provincial. Dijo que el TSJ está "acéfalo" y que, a su entender "la prioridad la tiene la causa de derechos humanos". "Pero entonces busquemos a otro para el cargo", aclaró.
Eduardo Benítez (UCR) contrastó la celeridad con la que se trabajó para cubrir las vacantes en el tribunal con la decisión del juez. "Trabajamos con mucha urgencia y esto retrocede bastante las cosas", dijo el presidente del bloque de la Concertación.
Desde el justicialismo, Ariel Kogan ratificó su decisión de no acompañar la postulación.
Daniel Baum (Servicio y Comunidad) no apoyó la preocupación de Rachid, con quien comparte interbloque, y respaldó a Labate junto al resto del oficialismo. Rodolfo Canini, de Une, opinó que las declaraciones de Labate sólo le generaban "mayor respeto" por el candidato.