Si bien es un elemento de presión, la circular que firmó Joseph Blatter no asustó lo suficiente a los dirigentes del Barcelona. Desde Escocia, los catalanes se mantienen férreos en la idea de que no tienen "ninguna obligación" de liberar a sus jugadores porque los Juegos no forman parte del calendario oficial FIFA.
El club catalán tiene en cuenta la posición expresada por la Asociación Europea de Clubes (ECA) y su presidente, Karl Rummenigge, quien, según el Barça, publicó un comunicado dando "su apoyo a todos los clubes que se enfrentan actualmente a la pérdida de jugadores importantes" a lo largo del torneo olímpico.
Lo cierto es que el club azulgrana espera llegar a un acuerdo con la AFA y la FIFA para poder contar con Lionel Messi al menos en el partido de ida (12 o 13 de agosto) de la clasificación a la Liga de Campeones.
En tanto, Jorge Messi, padre de Lio, dejó en claro que su hijo "no se va a escapar de la pretemporada" del Barcelona, pero sí remarcó que la "Pulga" desea "jugar los Juegos Olímpicos". Según entiende, "la FIFA tiene que asumir toda la responsabilidad" en el conflicto.