WASHINGTON (AFP).- Los aspirantes demócrata y republicano a la Casa Blanca, Barack Obama y John McCain, defendieron una reforma migratoria en un encuentro organizado por una asociación hispana en Washington, durante el cual el candidato oficialista recibió duros calificativos de algunos presentes por su apoyo a la guerra en Irak.
Los dos candidatos, invitados por la Asociación Nacional de Funcionarios Electos Hispanos en momentos en que el cortejo del voto latino se hace cada vez más evidente, se presentaron por separado, a pesar de que McCain había exhortado reiteradamente a su rival a hablar desde un mismo escenario a los hispanos.
Obama dijo que Estados Unidos "no ha sido serio en resolver este problema" de la inmigración ilegal, en un país donde viven unas 12 millones de personas sin documentos.
Una reforma que permita un "camino a la ciudadanía" para los indocumentados "será una de mis prioridades
desde mi primer día" en la Casa Blanca, expresó Obama, quien criticó la construcción de un muro en la frontera sur del país para combatir el pasaje de inmigrantes clandestinos, pero al mismo tiempo sostuvo que "hay algunas áreas en donde las barreras tienen sentido".
Obama defendió el trabajo de su rival McCain en materia de inmigración -el senador republicano auspició dos proyectos de reforma que fracasaron en el Congreso en 2006 y 2007-, pero criticó lo que consideró un cambio de posición del candidato oficialista para ganar la nominación de su partido.
Fue precisamente por la oposición del ala más dura de los republicanos que las dos iniciativas de reforma migratoria fracasaron en los últimos dos años.
McCain dijo que para él la reforma migratoria "será una prioridad principal, ayer, hoy y mañana".
Ambos candidatos fueron consultados sobre la guerra en Irak, que McCain apoyó en el 2003 y Obama critica. Hay que "llevar a la guerra en Irak a un respetable, responsable y honroso final", expresó Obama.
El candidato demócrata también dijo que el gasto de una semana en la guerra en Irak equivale a la ayuda exterior que Estados Unidos provee anualmente a América Latina.
"Estos hombres y mujeres son mis hermanos y hermanas", dijo McCain al referirse a los soldados de origen hispano que forman parte de las fuerzas armadas estadounidenses, cuando fue súbitamente abucheado con fuerza.