El exitismo en el fútbol es la escoba que barre la mugre abajo de la alfombra. Pero una vez que los triunfos desaparecen, lo peor yace a la vista. Los torneos criollos son tan insólitos que hoy el Clausura lo pelean clubes envueltos en infiernos internos.
Qué puede llegar a suceder de aquí en más es todo una incógnita. Ninguno de los equipos encumbrados parece firme candidato a quedarse con la corona, algo que no sorprende por la actualidad de cada uno. Los líderes Estudiantes y River (34), y el escolta San Lorenzo (31), quedaron frustrados tras la eliminación copera y sólo se mantienen en lo más alto por el valor de sus individualidades.
El "Pincha" se recuperó casi inmediatamente de su decepción, creyó en las palabras de sus líderes Verón y Sensini y cambió el objetivo, aggiornándolo al medio local. Claro, más allá de las conquistas contemporáneas, a Estudiantes no lo corren las mismas necesidades que a sus dos adversarios más próximos. Además, depende mucho de la "Brujita".
Así y todo, los platenses son los que parecen tener la "orquesta" mejor afinada de cara a las tres fechas que restan, y que los encontrará visitando a Huracán y Olimpo, y esperando en el Estadio Único a Colón de Santa Fe.
River es el Chaitén futbolístico, una amenaza constante, lo inesperado, el encono... Con más de tres años de anemia en sus vitrinas, en el club "millonarios" no se aceptan más fracasos.
Es más, el terrible cross a la mandíbula que le pegó San Lorenzo en la Libertadores no dejará de dolerle aunque el equipo de Simeone de la vuelta en este Clausura. ¿Le pasará lo mismo al "Cholo" que a Ramón Díaz en su último paso por Núñez? Fue en el 2002, cuando el "Pelado" le dio el título a la "banda", pero por estar enfrentado con José María Aguilar tuvo que irse en vez de recibir una renovación de contrato.
Con dos partidos de visitante (Colón y Banfield) y uno en casa (Olimpo), el futuro inmediato de River es imprevisible. La mayoría de sus jugadores atraviesan una amnesia futbolística y sólo Diego Buonanotte y Ariel Ortega se muestran como salvadores, dentro de un plantel plagado de figuras que para la próxima temporada será duramente "raleado". La aparente resurrección del "Burrito" dejó mal parado a Simeone, quien sigue creyendo que no debe ser titular. Claro, ahora dejarlo afuera sería pagar un costo muy alto.
San Lorenzo también enfrentará a Olimpo y Banfield pero, a diferencia de River, en la última fecha recibirá a Gimnasia de Jujuy. Las aguas están enrarecidas en el "Santo", al punto que Ramón Díaz está peleado con los referentes del plantel y hoy podría comunicar su alejamiento de Boedo.
La eliminación en la Libertadores desnudó contradicciones y enfrentamientos dentro de un plantel que en un principio pareció estar muy unido, incluso en la adversidad.
Los demás están demasiado lejos y la sensación es que el trío antes analizado peleará la corona local. Boca marcha a cuatro unidades de la cima y es poco probable que de un zarpazo de semejante envergadura, sobre todo si continúa avanzando en la Libertadores. ¿Le sucederá algo similar a San Lorenzo y River si queda eliminado? Es probable. Al parecer, Independiente y Vélez dejaron pasar el tren el domingo.
