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	Los pobladores de Chimpay evidenciaron su dolor ante la muerte de la pequeña Sofía. Mientras, la Justicia continuó con la investigación en el lugar donde encontraron el cuerpo de la víctima.

CHIMPAY (AVM).- "Monstruoso", "aberrante", calificativos que parecen no alcanzar para poder describir el horror de la muerte de la pequeña Sofía, la nena de 3 años asesinada en esta localidad, cuando se va conociendo con mayor detalle cómo sucedió el homicidio de la pequeña. Ayer, el fiscal de la causa, Miguel Ángel Flores, confirmó que la nena, que había desaparecido el miércoles por la tarde y cuyo cadáver fue hallado el viernes por la tarde, fue abusada por su asesino.

En tanto, se mencionó que la muerte de la pequeña se produjo por asfixia y que luego el criminal la degolló.

Todos estos datos, que habían sido recogidos por un pre examen realizado antes de enviar el cuerpo a la morgue judicial, fueron confirmados por los médicos que realizaron ayer por la mañana la autopsia en Roca.

Pero aún existe una duda entre los investigadores y es saber si el abuso sexual al que fue sometida la pequeña Sofía se produjo antes o después de su muerte. No se trata de un detalle menor dado que si se produjo antes el asesinato, todas las pruebas apuntan al padre de la criatura -Carlos Antonio Juárez de 24 años-, quien debería enfrentar no sólo cargos de homicidio agravado por el vínculo, con pena de hasta cadena perpetua, sino también una acusación por abuso agravado que también se pena con cadena perpetua. Pero de haber sucedido post mortem no habría delito punible en este aspecto.

Tras el hallazgo del cadáver y la realización de la autopsia ahora se han ordenado medidas tendientes a reunir la mayor cantidad de indicios posibles. En este sentido se harán pruebas de ADN a Juárez y serán comparadas con el semen hallado en la criatura. Por otro lado se trata de determinar si el padre de la nena había abusado de la nena en anteriores oportunidades. Para ello se secuestraron varias prendas de la nena de la casa.

Si bien en el círculo de investigadores de la policía y de la Justicia afirman que el caso ya está resuelto, aún queda un punto que desvela al grupo y es quién llevó hasta el lugar del crimen, ubicado a unos 10 kilómetros de la ciudad, al padre y la nena. Y es que no se puede entender aún cómo si fue un taxista lo hizo de buena fe o no.

En este plano, ayer la jueza penal Marisa Bosco ordenó el secuestro de un automóvil taxi y se ordenó que el conductor preste declaración testimonial.

De hallarse pruebas que determinen que este hombre, del cual no se dieron a conocer los datos filiatorios, fue quien los trasladó y no quiso hablar podría llegar a ser imputado por encubrimiento.

En tanto, Juárez permanecía detenido y aislado en la alcaidía de Choele Choel y será indagado mañana por la jueza Bosco.

El hombre, hasta el viernes a la tarde noche se mantenía en sus dichos "la nena está bien". No confesó haber sido el autor del crimen.