Las lluvias de ayer y una tenue nevada caída hoy llevaron alivio a los pobladores de Esquel, ya que permitió despejar en gran medida la ceniza volcánica suspendida en la atmósfera y ayudó a limpiar calles y casas.
Las lluvias cayeron ayer durante varias horas en una amplia zona del noroeste de Chubut, abarcando a Esquel, Trevelin, Lago Puelo, Río Senguer, entre otras localidades, además del Parque Nacional Los Alerces.
El agua permitió quitar la ceniza en suspensión y limpiar calles, casas e incluso la vegetación que hasta ahora aparecía de color gris a causa de la ceniza.
La región noroeste de Chubut ha sido la más afectada por la erupción del volcán Chaitén, situado en Chile, que obligó en ese país a evacuar dos localidades. El fenómeno comenzó el pasado 2 de mayo y tuvo un pico de emanaciones cuatro días después, para estabilizarse más tarde con una columna constante de cenizas.
El Comité Operativo de Emergencias que funciona a raíz de la erupción del Chaitén informó que nuevamente recibió datos de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (ONEMI) de Santiago de Chile, que indicó que la situación del volcán era "estable", aunque no podía observarse la emisión de cenizas por la alta nubosidad que había en la zona.
Por otra parte, los estudios diarios realizados en el agua de consumo humano en esa región volvió a determinar que es apta. Laboratorios locales también estudiaron cursos de agua naturales y en todos los casos los valores de los distintos componentes eran inferiores a los máximos establecidos en las normas de calidad del agua.
Asímismo, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) dijo que en Esquel y sus zonas aledañas el cielo permanecerá nublado durante la jornada con "probabilidad de lluvias y nevadas, probable reducción de la visibilidad por ceniza volcánica", ya que los vientos serán "regulares del sector oeste", que es la dirección que arroja la ceniza hacia la Argentina.
Fuente: DyN