| La detención del primo del presidente colombiano Álvaro Uribe, agravó los efectos del llamado proceso de la "parapolítica", iniciado desde 2006 sobre los nexos entre políticos y bandas paramilitares de ultraderecha. La investigación, que involucra en su mayoría a miembros de la coalición política que sustenta el gobierno del presidente Álvaro Uribe, la adelantan en forma independiente la Corte Suprema de Justicia y la Fiscalía General de la Nación. El máximo tribunal de la justicia colombiana se encarga de investigar a los congresistas, en tanto que la Fiscalía lo hace cuando son ex legisladores o dirigentes sin cargo en el Ejecutivo. Algunos congresistas que empezaron a ser investigados por la Corte decidieron renunciar para que la Fiscalía los investigue, porque pueden apelar los fallos, lo que no ocurre en la Corte, última instancia judicial. Hasta el momento, han sido vinculados 63 congresistas, de los cuales 36 están detenidos mientras se determina si serán llevados a juicio. De 102 senadores, 22 están en prisión, en tanto que de los 166 representantes a la Cámara, 14 se encuentran detenidos. Apenas 6 de esos congresistas pertenecen al opositor Partido Liberal, mientras que los restantes 30 pertenecen a partidos de la coalición oficialista. (AFP) | |