WASHINGTON.- El tono entre los dos aspirantes demócratas a la presidencia se tornó más áspero ayer, un día antes de la primaria de Pennsylvania, en la cual Hillary Clinton, a quien los sondeos le dan una ventaja de entre 6 y 10 puntos, pone todo en juego para llegar a la Casa Blanca.
Ambos rivales bombardearon en los últimos días las cadenas de televisión con virulentos avisos de campaña, sin dudar en ahondar las divisiones entre los demócratas.
Hillary Clinton lanzó ayer un nuevo aviso de campaña en el que se ven imágenes del ataque japonés a Pearl Harbor, de la crisis de los misiles en Cuba en 1962 y de Osama Ben Laden. "Es el oficio más difícil del mundo", y "debemos estar dispuestos a todo", se lee en el aviso televisado de unos treinta segundos difundido en YouTube.
En otra leyenda se retoma la célebre fórmula del ex presidente Harry Truman: "Si alguien no soporta el calor, que se vaya de la cocina". "¿Quién, según ustedes, reúne el perfil?", pregunta la voz unos segundos antes de que aparezca la imagen de la senadora Clinton.
Tras un debate televisado la semana pasada, en el que Obama se quejó de la agresividad de su rival, Clinton replicó que eso no era nada comparado con lo que le aguardaba frente a los republicanos en caso de ser el candidato demócrata. Agregó que para ser presidente había que tener nervios de acero.
El portavoz de Obama, Bill Burton, dijo que Clinton había votado la autorización solicitada por el presidente George W. Bush para ir a la guerra en Irak, y que era "paradójico que pida prestadas las tácticas del presidente para su propia campaña y que invoque a Ben Laden para alcanzar objetivos políticos". "Ya tenemos a un presidente que apuesta a la política del miedo, y no necesitamos otro", añadió.
Los últimos mítines de campaña también fueron ocasión de duros intercambios entre los dos precandidatos, que se lanzaron los peores reproches.
Durante una reunión en Reading el domingo el senador por Illinois acusó a Clinton de emplear una estrategia "de alcantarilla". "Usted ha aprendido las malas artes de los republicanos al adoptar sus tácticas", señaló Obama respecto de su rival.
Sondeos publicados ayer le otorgan a la ex primera dama una ventaja de entre seis y diez puntos de intención de voto en Pennsylvania. Hace algunas semanas, tenía una ventaja de 20 puntos en ese estado, de votantes mayoritariamente blancos, de mayor edad y menor nivel educativo que la media nacional, que suelen estar más inclinados a votar por la senadora por Nueva York. Un fracaso de Clinton en Pennsylvania enterraría sus ambiciones presidenciales.
Una severa derrota de Obama tendría serias consecuencias él. Es cierto que él ganó más estados que su rival, que dispone de más delegados y que obtuvo más votos que Clinton a nivel nacional, pero no ha ganado en ningún estado clave en la perspectiva de la elección presidencial de noviembre.
"Si Obama no derrota a Clinton en Pennsylvania, significará que habrá perdido en otro estado clave (...) y eso aumentará los interrogantes sobre su capacidad de vencer a John McCain y sobre quién sería nuestro mejor candidato en noviembre", declaró a la cadena MSNBC Howard Wolfson, un alto asesor de Clinton. (AFP)