| La cuestión de Tíbet es uno de los principales conflictos políticos y territoriales al que hace frente China desde hace 50 años. China, que reivindica a Tíbet como suyo desde el siglo XIII, ocupó militarmente en 1950 este reino del Himalaya, teocracia budista de unos 2,7 millones de habitantes. En mayo de 1951, Lhasa y Pekín pactan el "regreso a la madre patria" china de Tíbet con el Dalai Lama, el líder espiritual de los tibetanos. Pero en marzo de 1959 un levantamiento contra "la ocupación" y la "socialización forzada" deja miles de muertos. El Dalai Lama, que dijo haber firmado el acuerdo de 1951 bajo presión, huyó y fundó un gobierno en el exilio en India, que defiende la no violencia sin renunciar a los derechos políticos y culturales de sus compatriotas. Cortejado en Occidente, El Dalai Lama recibió el Nobel de la paz en 1989, tras otro levantamiento reprimido. En junio de 1988, renuncia a la independencia a cambio de un poder realmente autónomo, pero China le exige que admita que Tíbet es "una parte inseparable de China", algo a lo que se niega el líder religioso, que responde acusando a Pekín de "genocidio cultural". (AFP) | |