NEUQUÉN (AN).- A medida que se avanza en las obras para abastecer a los barrios de Neuquén capital más afectados por la falta de agua, la antigua red del servicio acusa el aumento de presión. Ayer, la rotura de un acueducto que pasa debajo del barrio Alta Barda aisló al sector centro oeste durante horas y recién por la tarde se pudo comenzar a presurizar el sistema.

Si bien desde el EPAS negaron sistemáticamente otorgar la información respecto del origen de las roturas, las quebraduras y pinchaduras de caños tendrían relación con la mayor presión que se intenta dar a la red en estos días, sacando a la luz la debilidad y el desgaste del sistema.

El problema se originó en un tramo del acueducto que atraviesa el barrio Alta Barda en la intersección de las calles Los Tulipanes y Los Gladiolos. Según el parte oficial, durante la madrugada de ayer se detectó el problema en el ducto que atraviesa el barrio Alta Barda y que depende del Sistema Leguizamón, aunque no se brindaron detalles técnicos de la avería.

"Entre la 1:30 y las 2 de la madrugada se rompió un caño de 400 milímetros que sale de la llave del sistema", informó el presidente de la comisión vecinal de barrios Alta Barda y Gamma, Emilio Serrano. El vecinalista constató la realización de los trabajos, que consistieron en el recambio del tramo, y aseguró que la rotura no fue producto de un atentado ni del vandalismo. "No hubo gente que lo pinchara porque hoy observé a la gente del EPAS, que para las reparaciones excavó al menos a cuatro metros de profundidad", detalló. Más allá del ducto que se quebró a la salida de la llave, en el área noroeste de la ciudad es donde se hace evidente la crisis del servicio. En Alta Barda, señaló el presidente de la comisión vecinal, la crisis discrimina sectores. "El agua sube hasta el barrio por calles Leguizamón y Jujuy. Entonces, cuando llega a Alta Barda, perdió toda la presión en el resto de los barrios que alimenta en el camino", explicó Serrano.