La presidenta electa, Cristina Kirchner, se reunirá hoy en Brasil con el mandatario Luiz Inácio Lula da Silva, en un encuentro a agenda abierta pero con el tema energético en la mira.
La reunión, que responde a una invitación de Lula a la senadora durante la Cumbre Iberoamericana de Chile, pretende afianzar la relación estratégica con el principal socio en la región y aumentar la cooperación en las relaciones económicas y comerciales con principal atención a la cuestión energética.
Para ello, Cristina Kirchner, tiene agendados en Brasil encuentros con directivos de la petrolera Petrobras y con empresarios brasileños, reuniones de las que participará el canciller Taiana.
La petrolera brasileña acaba de descubrir un gigantesco yacimiento petrolífero en la plataforma submarina que representará para Brasil un aumento del 60% en sus reservas de crudo.
El presidente Kirchner, se entusiasmó con la posibilidad de que "esa veta (hidrocarburífera) pueda llegar a Argentina", cuyo abastecimiento de crudo fue mermando en forma pronunciada en la última década debido a la falta de inversiones en la búsqueda de nuevos yacimientos.
En julio pasado, durante una reunión al margen de la Cumbre del Mercosur, en Asunción, el presidente Kirchner le pidió a Lula que ampliara sus envíos diarios de energía, que entonces rondaban los 700 MW diarios. En esa oportunidad, el mandatario brasileño accedió al pedido, y en menos de 72 horas se comprometió a garantizar otros 400 MW adicionales.
Cristina Fernández afirmó que la captación de nuevas inversiones será uno de los ejes de su gestión y deslizó que Brasil debe ser un factor fundamental en la mentada "segunda industrialización argentina" que buscará su gobierno. Para ese plan, es crucial el factor energético. Un bien que comienza a escasear por la falta de inversiones en el sector y que generó una crisis en el invierno pasado, lo que obligó a recortar envíos a la industria.
En el plan global de inversiones que la brasileña Petrobras anunció meses atrás hasta el 2012, Argentina se lleva 2.800 millones de dólares, sobre un total de 15.000 millones de dólares que invertirá en todo el mundo.
El viaje también responde a una señal política puesto que será el primero en la agenda internacional de la futura mandataria argentina, lo que marca el lugar que la relación con Brasil ocupará en la política exterior. El canciller Jorge Taiana apuntó que en el encuentro se persigue lograr "avances rápidos" en el abandono del dólar como moneda de intercambio comercial entre ambos países, cuyo comercio bilateral representa para Argentina unos 24.000 millones de pesos anuales. (AFP y DyN)