| ESTAMBUL (DPA) - El ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Ali Babacan, logró que Bagdad prometiera tomar medidas contra de los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), activos en el norte de Irak. Así todo, no es la capital iraquí la que determina qué sucede en aquellas regiones del norte donde se atrincheran los rebeldes del PKK. Las decisiones referidas a las actividades kurdas son tomadas directamente en Erbil, la capital de la región autónoma kurda en Irak. El ministro de Relaciones Exteriores iraquí, Hoshiar Zebari, con quien se reunió Babacan en Bagdad, es kurdo. Pero si bien los kurdos pueden influir en las decisiones del gobierno iraquí, el diálogo político funcione en ambas direcciones. Al Maliki dispuso ayer el cierre de todas las oficinas del PKK en Irak. Sin embargo no indicó qué ocurrirá con los campamentos del PKK en el norte del país. Esa zona desde la que opera el PKK no es controlada por tropas gubernamentales sino por los "peshmergas", que sólo se sienten comprometidos con las órdenes de la administración autónoma kurda iraquí bajo la presidencia de Masud Barzani. | |