Independiente le planteó otra vez un encuentro parejo a Peñarol y, pese a que en ningún momento puso en serio riesgo el triunfo del marplatense, demostró que hoy la diferencia entre un equipo y otra es mínima. Al final fue 84-78 para el "Mil rayitas" y por eso mañana habrá tercer cruce para saber quien pasa al cuadrangular final de la Copa Argentina.
El quinteto neuquino empezó a toda orquesta, con Byron Johnson (12 puntos) provocando el desequilibrio, para ponerse rápidamente 8-2 arriba.
En un partido de ráfagas, el turno fue de los marplatenses, que pasaron arriba en tres minutos, por 16 a 8, con una buena gestión de Román González y el panameño Eric Rodríguez.
El dominio del local se dio hasta los dos finales del cuarto, cuando reaccionó el "Rojo" y por eso lo ganó por 24 a 23. Martín Melo logró 8 puntos.
Sergio Hernández sacó de cancha al base titular Pablo Rodríguez, la función pasó a manos de Alejandro Diez, y cambió la imagen del conjunto.
También fue importante el ingreso de Lucas Picarelli y una modificación en el sistema defensivo. A Independiente se le cerró el cesto -sólo consiguió diez puntos- y Peñarol se fue al descaso arriba por 45-34.
Si bien le costó mucho superar la presión en la marca que ejerció el equipo de Sergio Hernández, Independiente mejoró su producción en el tercer cuarto. Llegó a ponerse a seis puntos, pero después otra vez tomó el control el quinteto marplatense y así se clausuraron esos 10 minutos con un 59-50 para el "mil rayitas".
La tónica del encuentro no cambió en el tramo final, con muchos errores y desconcentraciones de ambos lados. Las apariciones de Esteban de la Fuente, Juan Pablo Sánchez y, fundamentalmente, Esteban López, le dieron cierta esperanza al "Rojo", pero no alcanzó.