Las autoridades consideran que la velocidad es una de las causas más frecuente en los accidentes que ocurren en la Bustillo, pero es sólo una entre las inobservancias del debido cuidado. El consumo de alcohol antes o durante el viaje, la falta de distancia respecto del vehículo que los precede y las maniobras torpes que permiten que el auto "muerda" una banquina, a menudo le cuestan la vida al conductor, y a los inocentes que viajan con él o en el vehículo al que embisten de frente.
Argentina detenta uno de los índices más altos de mortalidad por accidentes de tránsito, con un promedio de 22 muertos por día y unos 8.200 por año. Esos accidentes son la primera causa de muerte en menores de 35 años y la tercera sobre la totalidad de la población.
Las cifras alarman si se atiende a que los promedios de víctimas fatales en relación con la cantidad de vehículos circulantes superan en en ocho o 10 veces a los de otros países desarrollados.
El dato revela que en un año y sobre cada millón de vehículos circulantes, en la Argentina murieron 1.310 personas. En ese mismo lapso y relación murieron 138 en Suecia, 166 en Italia, 206 en Holanda y 209 en los Estados Unidos.
Las cifras de la ong "Luchemos por la vida" indican que los conductores argentinos de entre 15 y 25 años son los que participan en mayor cantidad de accidentes de tránsito y cometen más errores que los mayores al conducir. Los despistes, vuelcos, choques contra objetos fijos y no uso de cinturones de seguridad, hace que mundialmente se los considere "conductores de riesgo".