SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Johnny Mansilla, el conductor de 22 años del auto que el jueves protagonizó un accidente en el que murieron cuatro jóvenes en Bariloche, continúa internado en el Hospital Zonal con severos politraumatismos, pero el juez Miguel Angel Gaimaro Pozzi ya lo imputó por homicidio culposo agravado y espera a que mejore y le den el alta médica para indagarlo.
Por otro lado, los cuerpos de las cuatro víctimas fatales del accidente de tránsito fueron inhumados ayer por la tarde, a las 17, en el cementerio municipal, mientras las banderas del Municipio ondean a media asta y el colegio Amuyén, de Virgen Misionera, en cuyo gimnasio se realizó el velorio, continuó sin clases por segundo día consecutivo. En realidad, todo el barrio parecía paralizado por el luto hasta el mediodía, y los vecinos se aprestaban para la oración de despedida de los féretros, que permanecieron cerrados, y el traslado de los cuerpos al cementerio.
La decisión de imputar a Mansilla obedece, probablemente, a que hasta el momento no se consideró probado que haya participado del accidente otro automóvil, más allá de que la "picada" existiera, y también el Ford Falcon blanco del que hablan algunos testigos.
El Ford Falcon sospechoso fue secuestrado luego de que un vecino denunciara que lo vio abandonado sobre la ex ruta 258 y que lo remolcaron hasta una vivienda de la calle Pasaje Gutiérrez. Allí lo ubicó la policía y lo secuestró para realizarle pericias, pero las autoridades ya anticiparon que no tenía rastros de haber chocado o rozado a otro vehículo. La supuesta "picada", en ese caso, quedaría como un detalle anecdótico en el marco del drama y de la causa, aun si se confirma que se realizó sobre la avenida San Martín, desde el Centro Cívico hasta el monolito del kilómetro 1 de la avenida Bustillo.
Una mujer declaró que salió de la discoteca "Babilonia" poco antes de las 7 y esperaba un taxi cuando observó que el conductor de un Ford Falcon blanco y el del Renault 18 rojo se desafiaron acelerando sus motores. "Parecía que iban a explotar" declaró la testigo, y su testimonio fue corroborado por un vecino que observó el desafío desde una ventana del edificio Bariloche Center. De manera provisoria, el juez Gaimaro Pozzi encuadró el hecho como "homicidio culposo agravado por conducción imprudente de vehículo automotor y por la pluralidad de víctimas".
Ayer por la mañana se presentaron en el hospital el secretario Carlos María Rayces y el agente fiscal Marcos Burgos para recibir el testimonio de los sobrevivientes, pero sólo escucharon a Joaquín Chandía y a Yanina Márquez Cañuqueo, de 22 y 21 años respectivamente, dado que ya existiría la decisión de imputar a Mansilla, que deberá ser indagado por el magistrado con las garantías de rigor y en presencia de un abogado defensor.
El director del Hospital Zonal, Felipe de Rosas, informó que el estado de los heridos era satisfactorio dentro de un cuadro con politraumatismos, pero descartó que estuviera la vida de alguno en riesgo, y aventuró que hoy podrían ser dados de alta.