SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Una verdadera multitud colmó las instalaciones del Aeroclub Bariloche y participó del "Sundance 2007", la fiesta electrónica más importante de esta ciudad. El evento ingresó en su momento más esperado después de las 6 de la madrugada, cuando comenzó a hacerse de día y llegó al clímax a las 6.30, con los primeros rayos de sol. Más de 2.000 jóvenes y adultos bailaron desenfrenadamente ante los rayos de Febo.
El clima fue el principal aliado de los organizadores y les regaló una noche idílica, sin viento y con temperatura más que agradable.
Ello motivó a la mayoría de los noctámbulos locales a abandonar las tradicionales discotecas y emprender la peregrinación hacia el ocasional santuario de la música electrónica, emplazado durante una noche en dependencias del aeroclub. Miguel Siver y Luis Neiva (el dúo Spitfire, de Buenos Aires), Facundo Carri (Córdoba), Carlos Schaw (Capital Federal), Nicolás Sasso y "K-NO" (Alejandro Lefemel, de Bariloche) fueron los DJ estrella de la noche que aportaron la música house que inundó la noche del este barilochense. La iluminación también fue espectacular y estuvo a cargo de otro residente, Roberto Macchi.
"Vine por primera vez el año pasado y me entusiasmé; voy a todas las fiestas electrónicas que se organizan en Bariloche", aseguró Pamela, mientras pugnaba con sus amigas por llegar hasta la barra y pedir una Speed. Dijo que para Navidad asistió a la fiesta organizada en el predio de los Madero (en dina Huapi) y el año nuevo lo recibió en la base del cerro Catedral, donde se organizó otra fiesta con "electronic music" en Punto Base. El viajo hangar del aeroclub fue convertido en una gran discoteca. Los organizadores no dejaron nada librado al azar y ofrecieron un espectáculo sin fallas. En uno de los laterales del hangar se emplazó el escenario con la cabina para los DJ y frente a ellos se ubicó el sector VIP. Luego se emplazó el sector general y como el lugar se preveía chico, se instaló una globa gigante, con más de 150 metros cubiertos. Había cuatro barras, con un ejército de barman. La cerveza, el champán y las bebidas energizantes se consumieron por hectolitros.
También se instaló un impresionante equipo de sonido, otro de iluminación y todo el hangar fue decorado con grandes cortinados. Cerca de 150 personas fueron contratadas para la fiesta: gastronómicos, técnicos y de seguridad. También se convocó a los bomberos de Dina Huapi, a personal de la policía rionegrina y Federal, ambulancias y médicos y un complejo sanitario con baños químicos. El evento fue promovido por la empresa Cahadesur, que administra las discotecas Genux, Tequila y Pacha.
Cuando el calor comenzó a ser insoportable, hacia las 9.30 de la mañana, los últimos comenzaron a retirarse y el sonido electrónico se apagó. La próxima cita será el 26 de enero, también en el aeroclub.
