NEUQUEN (AN).- La idea del grupo de luthiers es fundar una escuela-taller que combine el aprendizaje del oficio con la posibilidad de sistematizar el conocimiento. Carlos Alvarado imaginó a la Villa El Chocón como un sitio posible, en virtud de su ubicación en la provincia y la posibilidad de desarrollar el taller. En principio sería un ciclo de dos años con dos grandes áreas específicas: el taller propiamente dicho y el estudio de la física acústica.

El antecedente inmediato es la experiencia de la escuela de Lago Puelo, que tenía un ciclo de cinco años y cuya continuidad estuvo en peligro debido a la falta de presupuesto. Ahora se redujo un año la carrera "y los chicos no pueden venir al encuentro porque están en plena actividad", indicó.

En cuanto a salida laboral, consideró que no habrá problemas puesto que en la Argentina hay un luthier cada 25 mil habitantes -antes la proporción era uno por 20 mil habitantes-, con lo cual la demanda podría satisfacerse sin problemas. Recordó que las únicas alternativas para los interesados en el oficio de luthier son el aprendizaje en talleres particulares; la universidad de Tucumán o el camino del autodidactismo.