A diferencia de 2004, cuando reaccionó convulsivamente con una apresurada reforma del Código Penal, el Congreso tomó distancia de los nuevos reclamos en materia de política de seguridad presentados por Juan Carlos Blumberg y considera que el peso de las respuestas recae ahora sobre el Poder Ejecutivo.

"La gran mayoría de los pedidos no tiene que ver con normas penales", advirtió la titular de la comisión de Legislación Penal, Rosario Romero (Frente para la Victoria).

Dos años atrás, cuando los actos de Blumberg frente al Congreso provocaron febriles sesiones para cumplir con la mayor parte de sus exigencias, la comisión de Legislación Penal de la cámara baja se transformó en el epicentro de las discusiones, con el padre de Axel sentado junto con los equipos de asesores.

Con cierto alivio, los legisladores desmenuzaron el nuevo petitorio y advirtieron que la mayoría de las propuestas apuntan hacia el gobierno nacional, el bonaerense y la Justicia. "Hubo reclamos referidos a la urbanización de las villas miserias, a la política contra la drogadependencia y el narcotráfico, pero no advertí reclamos referidos a la legislación penal", repasó Romero.

Desde la oposición, las interpretaciones fueron similares. "El tema de la seguridad no está vinculado a la modificación de las leyes sino al cumplimiento de las que están en vigencia", evaluó Fernando Chironi, titular de la bancada radical de la cámara baja. (DyN)