ALUMINE (AZ).- De la misma manera que ocurre hace unos meses en otras localidades de la región, el servicio de internet en esta ciudad deja mucho que desear. Cortes permanentes en el suministro, franjas horarias saturadas y la falta de respuestas concretas de parte de la firma prestadora, transformaron la situación en caótica para los vecinos.
Las quejas de los usuarios de esta localidad, hasta aquí, no encontraron una solución seria ya que los empleados administrativos locales poco pueden hacer para resolver un problema de fondo que estaría relacionado con la falta de inversiones.
Hartos de no poder contar con un servicio acorde a los costos, los socios evalúan por estos días recurrir a la oficina de Defensa del Consumidor de Zapala para hacer valer sus derechos y exigir respuestas concretas.
"El problema comenzó hace mucho tiempo y ahora es prácticamente imposible utilizar en forma normal el servicio, ya que cuando no se corta, directamente está desactivado" explicó uno de los usuarios.
La prestadora del servicio es la empresa Frontera Digital pero sus directivos nunca aparecieron por Aluminé para explicar detalladamente cuáles son los inconvenientes y de que manera podría normalizarse la situación.
Hace varios meses, cuando los reclamos eran prácticamente masivos, un técnico de la empresa visitó la ciudad y mantuvo un encuentro con los usuarios.
Sin embargo, los problemas siguieron a la orden del día y las soluciones brillaron por su ausencia.
"No sólo es lento, sino que además se bloquea a cada momento con lo cual no podemos bajar datos" sostuvo una mujer en representación de una firma comercial de la localidad.
Los encargados de recepcionar los reclamos son empleados locales quienes cumplen horario de comercio. Cuando las fallas se generan fuera del período de atención al público, los usuarios deben esperar hasta el día siguiente para plantear sus quejas. "Lo que más nos indigna es que cuando pedimos explicaciones nos dicen que seguramente es problema de la computadora" señaló otro asociado al servicio.
Pese a que la calidad de la prestación es paupérrima, la empresa Frontera Digital sigue cobrando puntualmente la cuota.
El costo para los usuarios particulares es de 100 pesos mensuales mientras que los comercios deben abonar una suma superior.
"Para colmo están entregando recibos de una firma denominada Ciudad Global que no sabemos que relación tiene con nuestra ciudad" reveló uno de los vecinos.
También comentó que ña mayoría de los usuarios de la red tuvo que firmar un documento inicial por el monto de 200 dólares para ser aceptados como clientes de la prestadora.
Si para los particulares la situación es traumática, peor es el caso de los ciber cafés que dependen de la agilidad del servicio para mantener su estructura financiera.
Al menos dos de los tres comercios de este rubro ya le enviaron sendas cartas documento a Frontera Digital exigiendo respuestas a las dificultades pero tampoco obtuvieron una solución seria.
"Estamos cansados, el servicio es de muy baja calidad y ni siquiera nos atienden como corresponde" concluyó otra usuaria.