PARíS (DPA) - La decisión de Francia de proporcionar sólo 200 efectivos a las fuerzas de paz de las Naciones Unidas (ONU) en el sur del Líbano desató críticas al presidente Jacques Chirac, por no haber sostenido su promesa de contribuir a la estabilización del sur de ese país.

En tanto, el ejército libanés continuó ayer su despliegue en el sur del país, a la espera de unos refuerzos internacionales que la ONU tiene dificultad en encontrar para consolidar una tregua aún precaria en la región.

La comunidad internacional duda aún en comprometerse militarmente en la región, dada la negativa de Hizbollah a entregar sus armas de manera "apresurada", y a la confusión reinante sobre el mandato y los medios para formar la nueva FINUL (Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano) ampliada.

Las dudas de la comunidad internacional también se vieron propiciadas ayer por una información de la policía libanesa dando cuenta de ataques aéreos israelíes, desmentidas luego.

Desde Nueva York, el subsecretario general de la ONU, Mark Malloch Brown, indicó que la organización no cuenta aún con los 3.500 hombres que desea enviar a Líbano en un plazo de 10 días. Ante esta situación, Brown hizo un llamamiento urgente a los países europeos para que proporcionen rápidamente tropas, estimando que los próximos días serán "muy delicados".

Hasta ahora las ofertas más firmes han venido, dijo, de Bangladesh, Indonesia, Malasia y Nepal. Sin embargo, los europeos deben estar presentes para que la futura FINUL tenga un "carácter internacional que incremente su legitimidad", agregó.

Francia, con la que contaba la ONU para aportar lo esencial de la fuerza, decepcionó al ofrecer el envío de sólo 200 hombres como refuerzo de urgencia que se sumarán a los 200 cascos azules franceses de la actual FINUL.

En este contexto, el jefe de operaciones de mantenimiento de paz de ONU, Jean-Marie Guéhenno ha insistido en que Francia debe "ser la espina dorsal" de la FINUL ampliada. Según indica ayer el periódico "Liberation", la escasa contribución de Francia puede considerarse un insulto al secretario general de la ONU, Kofi Annan "Esperábamos más de Francia", dijo el ministro de Asuntos Exteriores libanés, Fawzi Sallouokh, a la BBC.

Entretanto, el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, pidió a Francia que envíe más soldados para integrar la misión de paz. "Francia dijo que quiere enviar algunas tropas, nosotros esperamos que envíen más", dijo Bush .

La semana pasada, el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó la resolución 1701 para desplegar en el sur del Líbano una fuerza de paz de 15.000 soldados como parte del plan internacional de poner poner fin a la guerra entre Israel y Hizbollah. Las tropas de la Fuerza Interina de la ONU en Líbano (UNIFIL) deben acompañar a 15 mil soldados libaneses que ya han comenzado a trasladarse al sur del país para asumir el control de la región.

París parece estar poco dispuesto a enviar tropas en números grandes. Alega que ya sufrieron víctimas en esfuerzos anteriores de pacificación de la ONU. Francia perdió en Bosnia 71 hombres y en el Congo las tropas de la Unión Europea tuvieron que intervenir para ayudar a los uniformados de la ONU. En su opinión, una UNIFIL más fuerte necesita más medios y un cuerpo de oficiales reforzado.

Chirac reafirmó ayer a la canciller alemana, Angela Merkel, las condiciones que, en su opinión, debe reunir el refuerzo de la UNIFIL "Las tareas, reglas de despliegue, la cadena de mando y los medios de esta tropa" deben definirse claramente, dijo Chirac. Además, debe haber una distribución "equilibrada" de los contingentes de tropas de los países participantes que "refleje la implicación de toda la comunidad internacional, entre ella la de los países europeos".

Entretanto, los gobiernos de Italia y Finlandia aprobaron el envío de tropas al Líbano.

En los próximos días se decidirá el número de soldados a enviar a Líbano. De forma no oficial se habla de unos 3.000. Prodi exigió que se den dos condiciones para el despliegue: debe haber un mandato de la ONU con una reglamentación clara de las tareas y la milicia radical chiíta Hizbollah debe estar de acuerdo con el despliege.