BUENOS AIRES (Télam).- La hermana de Andrea Viera, la joven que murió tras ser torturada en una comisaría en mayo de 2002, aseguró que no quiere "la pena de muerte" para la suboficial condenada por el hecho, aunque pidió que sea alojada en una cárcel "común, con presos comunes y sin privilegios".

"Yo no quiero la pena de muerte para ella (por la ex cabo primero Marta Jorgelina Oviedo), sólo que esté en una cárcel común, con presos comunes y sin privilegios", dijo Eugenia Vázquez.

Sin embargo, los jueces beneficiaron a Oviedo con la prisión domiciliaria, ya que sufre problemas de salud.

Tras escuchar el veredicto que condenó a prisión perpetua a Oviedo y absolvió a otros cuatro efectivos, Vázquez afirmó que ahora intentará, junto a sus familiares y a sus abogados, encontrar a los otros policías que participaron de las torturas de su hermana.

"En la lectura del fallo fueron nombrados otros policías y vamos a ir a otro juicio por Andrea. Estos estaban acusados pero el fiscal de instrucción Claudio Pelayo los sobreseyó. Pero ahora vamos a ir por ellos y no se van a salvar", agregó.

Respecto a la condena que dictó el tribunal quilmeño, Vázquez consideró que los cuatro policías absueltos fueron beneficiados "porque los jueces entendieron que no había pruebas suficientes".

"Pero el cuerpo de Andrea habló por sí solo. ¿Qué más pruebas quieren?. Además, están los testimonios de mi cuñado Cardozo y de los que estaban detenidos en la comisaría", explicó ayer la hermana de la víctima.