Número de Visitas Agréguenos a Favoritos 
TITULOS SECCIONES SUPLEMENTOS OPINION CLASIFICADOS SERVICIOS NUESTRO DIARIO PRODUCTOS
 
Martes 04 de Julio de 2006
 
Edicion impresa pag. 38 y 39 > Sociedad
Olympus Stylus Verve

Cuando alguien ve la Stylus Verve por primera vez, ocurren dos cosas: la primera es una exclamación acerca de su tamaño: ¡qué chiquita es! Pero a pesar de ser una cámara tan pequeña y de tener una forma un poco atrevida, se puede sostener y disparar con la mayor comodidad. La distribución de los controles de configuración y de graduación del zoom está muy bien diseñada, y éstos se encuentran justo al alcance del pulgar. No es que ésta sea una cámara para señoritas, pero tal vez a alguien con la mano muy grande (un basquetbolista o un leñador, por ejemplo), la pequeñez del conjunto le ocasione alguna incomodidad. Tiene el tamaño aproximado de un teléfono celular, así que se puede llevar en un bolsillo.

El segundo comentario común acerca de la Verve tiene que ver con sus supuestas capacidades acuáticas. Esta cámara está diseñada para soportar salpicaduras o spray, para, por ejemplo, poder usarse en la playa. Sin embargo, no es sumergible. Si la compran, dejen sus fantasías oceánicas a un lado, porque aunque la Verve no le tiene miedo al agua, no sabe nadar.

En la Verve encontramos una pantalla TFT de 1,8 pulgadas que ofrece una gran definición casi desde cualquier ángulo. A través de esta pantalla se accede a la interfaz de configuración y control de la cámara, que tiene varios puntos a favor: está muy bien organizada y viene en castellano. El resultado es que la cámara es muy fácil de usar. Cualquiera la puede tomar y casi inmediatamente estar sacando fotos, si no en las condiciones óptimas, al menos de manera aceptable.

Entre las opciones hay 13 configuraciones prefijadas para distintos tipos de fotos. Entre ellas: retrato, escena nocturna, interiores y paisaje. Cada una de estas opciones va acompañada de una pequeña imagen de ejemplo, para facilitar la elección. Para los que se inician, este menú será bienvenido, pero estamos seguros de que los que ya saben algo de fotografía hubieran preferido que también figuraran las características más técnicas de cada preset, para realizar una mejor evaluación de su utilidad.

La calidad de las fotos tomadas es muy buena, y el ajuste de luminosidad automático de la cámara hace que se puedan sacar fotos aceptables incluso en condiciones de poca luz. El enfoque también es automático y se activa al mantener presionado el botón de disparo a la mitad de su recorrido, antes de sacar una foto. Los resultados son excelentes para una cámara de este tamaño.

La Stylus Verve viene con una tarjeta de memoria XD de 16 MB, lo que casi obliga a comprar más memoria. Recordemos que el formato XD fue creado por Olympus y Fuji para usarse exclusivamente en cámaras digitales y no es compatible con otros tipos de dispositivos, como PDAs o reproductores MP3.

A pesar de su flexible configuración de resoluciones, aquí nos enfrentamos con una molestia, y es que cada vez que apagamos la cámara, la configuración de resolución elegida se pierde, y al encenderla de nuevo, aparece fijada en el preset de fábrica, que es 2272x1704. Para sacar nuestras fotos a menor resolución y hacer más tomas, tuvimos que internarnos en los menús de configuración para hacer que la cámara recordara nuestros cambios.

En definitiva, la Stylus Verve de Olympus es una cámara de bolsillo que llama la atención por su diseño atractivo y su soberbia pantalla.

 
notas relacionadas
Google se juega por Firefox
nota principal
haga su comentario otros comentarios
 
 
sus comentarios
Diario Río Negro.
Provincias de Río Negro y Neuquén, Patagonia, Argentina. Es una publicación de Editorial Rio Negro SA.
Todos los derechos reservados Copyright 2006