El acatamiento a la medida de protesta lanzada por los expendedores de combustibles en Neuquén fue dispar y con niveles inferiores a los que se registraron en la medida anterior, según reconoció el presidente de la cámara empresarial, Adolfo Grittini. Del lado de Río Negro, en Roca la adhesión fue mayoritaria, aunque con apertura de la estaciones que son propiedad de las compañías petroleras.

Mucha de las estaciones de servicio del centro neuquino dejaron de vender combustibles a la hora señalada; en general se trató de los establecimiento grandes. Las expendedores oficiales de las petroleras, con era de esperar, siguieron vendiendo naftas y gasoil como si nada pasara.Quizás porque las estaciones más pequeñas no hubo adhesión a la medida, en las gasolineras oficiales de las petroleras no se formaron colas.

"Desde la protesta anterior no hubo ningún tipo de respuesta del gobierno nacional. Estamos dolidos porque vemos que, al mismo tiempo, otros sectores consiguieron respuestas", sostuvo, por su parte, el vicepresidente de la Cámara de Expendedores de Río Negro y Neuquén, Marcelo Pirri. (AN/AR)