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25 » Jun 2008 |
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No quiero tener hijos… ¿y qué? |
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Serás hija. Obediente, decente. Serás hermana, leal, compañera y siempre atenta. Serás amiga, compinche y serás independiente, pero no tanto. Serás inteligente, pero sólo lo suficiente. Serás hembra y bien hembra, tanto que no necesite a otra. Y serás madre, por sobre todas las cosas, serás madre. Abnegada, devota, incondicional. Serás madre. La mejor de todas, y lo serás a tiempo completo. Porque para eso viniste al mundo.
¿Les suena de algún lado?
Tengo dos amigas que se hincharon las pelotas. Que odian ese mandato social y que desde hace tiempo gritan lo mismo: “No quiero tener hijos…. ¿Y qué?”. Y no es que mis amigas son dos solteronas resentidas. Dos estúpidas a las que nadie las mira ni les presta atención. Dos histéricas con tiempo libre y ganas de provocar. No, para nada. Una apenas llega a los 30, está en pareja y tiene ganas de seguir estándolo. Y la otra ya bordea los 40, tuvo tantos novios como quiso y a todos los dijo lo mismo: “Los chicos no son para mí”. Y tuvieron que dar miles de explicaciones. A todos ellos, a sus padres. A los padres de ellos. A tíos, tías, abuelos, vecinos, amigos, conocidos, hermanos, primos, taxistas, colectiveros, monjas, maestras de la primaria, a mí…
El fin de semana las senté a las dos y les hice la misma pregunta otra vez.
-¿Tener un hijo te completa como mujer?
Esto me dijeron:
-"¡No! Me resisto a creer que durante 20 o 30 años la sociedad y la naturaleza nos "preparan" para ese supuesto momento crucial y hasta mágico. Me niego a pensarme como un depósito de sensaciones y conocimientos destinados a "ese" momento. Y me rebela que el mundo nos vea como posibles, futuras o consolidadas "mamás". Las mujeres somos mujeres (nacidas o no), seres independientes y consistentes. Es decir, no necesitamos el hijo para sentirnos completas. O acaso no necesito tener un hijo para creer que puedo y pude hacer todo lo que me llena, lo que me gratifica. Y hablemos del parto. ¿Quién en su sano juicio se puede considerar feliz por sufrir durante una, tres o cien horas el terrible dolor que, según cuentan, significa parir? ¿Para qué? Para que en el futuro, cuando el pequeño sume algunas estaciones, los padres quieran dejarlo con cualquier pariente, real o ficticio, que les haga la "gauchada" de cuidarlo mientras sus progenitores recuperan su vida. "Es un pensamiento egoísta", escucho siempre ante mis razonamientos. Puede ser, acepto posturas opuestas, pero soy una egoísta conciente. Aunque más mezquino me parece creer que ese hijo va a "prolongar" tu ser. "Sangre de mi sangre". O, según mi punto de vista, "hijo de mis frustraciones". Sé que mi postura puede sonar provocadora. No es mi intención convencer a nadie, sino seguir creyendo en mi como ser individual y no una prolongación. "Ya te va a llegar ese momento", me dicen. Soy una convencida de que no pasa por un tiempo, sino por una decisión. Cada uno se hará responsable de la suya, o no. Mientras, seguiré buscando mi proyección a futuro en mi ser".
-"Parece ser que la década de los treinta es de definiciones con alcance vitalicio: decidís si te casas, si tenés hijos, o si te quedás a vivir con tus viejos…Ahora bien. Me pregunto: ¿Por qué hay que tener hijos? ¿Dice algo de eso nuestro manual de instrucciones? ¿Cuándo decidimos nosotros qué queremos hacer con nuestras vidas? ¿Cuándo le da sentido cada uno a su propia vida? Miremos un poco la realidad. Conozco personas que si pudieran haber elegido, no hubieran tenido los hijos que tienen y hay personas que dicen "me tuve que casar". Algunas mujeres creen que comienzan a serlo el día que dan a luz y otras dan justo para la frase "no seré feliz, pero tengo marido". Hay de todo, ya sé. Volvamos a mirar… Encontramos agobio, insatisfacción, ganas de largar todo y salir corriendo, apatía, estrés, depresión, juventud gastada y envejecida, la mayoría a los treinta. ¿Por qué ese derroche de vida haciendo cosas o haciéndonos cargo de la vida que no queremos?. Podemos elegir. Podemos darle sentido a nuestra existencia sin tener hijos. Hay muchas cosas para hacer por los demás y por uno mismo, para ser felices, para proyectarnos si es eso lo que queremos. Para vivir y dejar vivir. Fundamentalmente".
Yo les creo. Y también les cree una escritora francesa llamada Corinne Maier que hace poco publicó "No kid", un panfleto anti-maternidad que enumera las 40 razones más importantes para no tener hijos. Allí argumenta que aparte del parto, lo que ya de por sí es “una verdadera tortura”, los hijos significan innumerables sacrificios sin sentido, implican despedirse de la libertad, la carrera...además de ser “la tumba del amor” y un virtual "arresto domiciliario" de los padres. Así dice Corinne: "Abran los ojos, sus hijos van a ser unos baby-loosers , destinados a la desocupación, o a un trabajo precario. Tendrán una vida aún menos divertida que la de ustedes, y con esto lo digo todo. No, sus maravillosos bebés no tienen ningún futuro, porque cada niño nacido en un país desarrollado es una catástrofe ecológica para todo el planeta...La única esperanza en este mundo actual la desnatalidad y la última libertad se encuentra en el hecho de decir: preferiría no hacerlo”. Y lo peor de todo: "Con el embarazo llega un largo invierno sexual".
Aquí unas buenas trece razones —de las 40 que expone en su libro— para no tener hijos:
1. El parto, una tortura
2. No dejes de divertirte
3. Trabajo y niños... ¡No, gracias!
4. No te quedes sin amigos
5. El hijo, la muerte del deseo
6. El hijo anuncia la muerte de la pareja
7. El hijo es un aliado objetivo del capitalismo
8. Es inevitable que tu hijo te decepcione
9. Convertirse en una supermami… ¡qué horror!
10. El hijo es la muerte de tus sueños de juventud
11. La escuela, un campo de castigo con el que hay que pactar
12. Cuidar niños o triunfar, hay que elegir
13. Hay demasiados niños en el mundo
¿Se les ocurre alguna otra? |
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16 » Jun 2008 |
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Un treintañero que está solo. Y aprendió a disfrutarlo. |
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Lo único que sé de este tipo me lo contó un amigo. Sé que bordea los 40, que estuvo casado, que se separó hace un par de años y que nunca más formó un pareja estable. Hay una frase que me contaron de él que nos puede dar una pista del por qué.
-Es imposible viejo. Conocés una mina, treintaypico, sola, separada, lo que sea. La invitás a salir, otro día a comer y a la tercera vez le dicen a las amigas "hoy no puedo salir con ustedes chicas...salgo con mi novio". No, no es así. ¿Qué les pasa? Es como si fueras un trofeo...y mirá que se los aclarás eh!...pero no entienden...lo único que quieren es decir "tengo novio".
Al tipo en cuestión no lo conozco y probablemente no nos crucemos nunca. Al que sí conozco, y mucho, es a mi amigo. También estuvo casado, también se separó y también dejó de creer en esa búsqueda desesperada. No está en pareja...¿y qué?.
Esa pregunta le mandé por mail. Y otra un poco más parecida a un favor: "¿No me lo contás para el blog?". Esto fue lo que me llegó a vuelta de correo:
"El principe o la princesa del color que les cuadre no va llegar. Ya fue, aceptémoslo y sigamos para adelante. Llegará algo más parecido a Glenn Close en Atracción Fatal que a Keyra Knightley en Orgullo y Prejuicio. Está bien, exagero. Tal vez, si tenemos suerte, se parezca a la obsesiva Sally que conoció Billy Cristal en aquella inolvidable comedia romántica que todos queremos protagonizar. Pero esa es una película y esto es el salvaje mundo real.
Tengo 33 y estoy solo, como ya se habrán dado cuenta por mi tono optimista. Ah, además son las cuatro de la mañana y mientras escribo escucho las “luminosas” canciones de Nick Cave, para terminar de pintar el personaje. Pasé por el matrimonio -salí abollado, pero zafé- y ya se empiezan a sumar los años sin una pareja formal, de esas que uno le presenta a la familia. He conocido mujeres de mi edad y veinteañeras, y la verdad que creo que ellas –o un gran porcentaje- están apuradas por manotear la ultima sortija que anda girando. Y que a nosotros, la realidad de estar solos cada vez nos asusta menos. Hasta hace unos meses me generaba temor la perspectiva de que me voltee una gripe y que no haya nadie que me compre pañuelitos descartables y se queje por mis mocos. Pensaba que tenía que estar con alguien con quien compartir esos domingos con frío afuera y calor en una cama de la que sólo se sale para ir al baño o a buscar algo para comer, mientras nos matamos a abrazos y besos y nos decimos cosas que tienen muchas “ches”. Pero hace un tiempo me di cuenta que si me quedaba esperando la princesa que cambiaría mi vida para siempre, iba a avinagrarme. Así que me puse como primer objetivo divertirme y dejar de lamentarme por mi suerte esquiva. Si hasta hace unos meses atrás pensaba que me parecía a “House”, pero sin su talento para la medicina ni sus ojos, o sea, un pobre tipo, ahora ya no. Me creo un hombre que tiene cosas copadas y otras no tanto. Y en esta misma situación veo a las mujeres de mi edad. Un par de ellas con las que estuve relacionado años atrás y con las que hace unos meses atrás reincidí - con la suerte que ya se imaginan- se engancharon después con unos flacos con más quilombos que Cristina desde que asumió la presidencia. Pero no les importó, había que probar. Resultado: lagrimas por todos los wines y esa frase de cabecera sonando again: “los hombres son todos unos pelotudos”. Y creo que en parte lo somos. Pero se debe a que no tenemos la presión biológica de que ya no podremos tener hijos después de una determinada edad. Y entonces los objetivos cambian. Y podemos seguir tomando en cantidades industriales con nuestros amigos mientras tratamos de convencer a una novel veinteañera de las ventajas de estar con alguien de “experiencia”.
Y así llegamos al punto de partida. Seguramente todos los que leemos este blog nos cruzaremos con una chica o un chico con personalidades que nos seduzcan. Pero ¿qué haremos con aquellas cosas que nos molesten? ¿Renunciaremos a las ventajas de nuestra soledad por una vida con ella o él?
El que tenga la respuesta, que arroje la primera piedra".
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Categoría : Varios | Comentarios[41]
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16 » Jun 2008 |
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La propuesta de "Lady 30" |
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El comentario llegó ayer. Lo quería compartir, por si alguien no lo leyó. Dice así: "BUENO, ME ENCANTÓ EL BLOG! LES DEJO UNA DIRECCIÓN EN LA QUE PODEMOS EMPEZAR A CONTACTARNOS LOS SOLTEROS CON GANAS DE CONOCERNOS ...ALGO TENDRÍAMOS QUE INVENTAR NO??
Actitud30@hotmail.com
armar un grupo de autoayuda?? jajaj No en serio , en algunas ciudades se organizan eventos o reuniones en casas, Qué opinan??. Un beso. Actitud".
"Lady 30", por lo visto, tiene espíritu de comunidad. Pero no es la única.
Suerte. Abrazo. |
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Categoría : Varios | Comentarios[50]
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08 » Jun 2008 |
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Una treintañera que está sola, muy sola. Y espera. |
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Si mirás de cerca hasta parecen una cofradía de "susanitas" estafadas.
Lo primero es un perfil arbitrario, obviamente. Son independientes,
muchas de ellas profesionales, algunas lindas, otras muy lindas y otras
muy arregladas, mundanas, sexualmente activas, preocupadas por el
cuerpo, algunas obsesionadas con la imagen, emprendedoras, laburantes, con
una vida social más o menos agitada, curtidas, unas más que otras,
acostumbradas a arreglárselas solas, sin compromisos, a un paso de cumplir
con ese ideal de mujer que todos exigen, pero con una queja que se
repite todo el tiempo: están solas, recontra solas. Son singles, pero, lo
que en un principio era sinónimo de autonomía y diversión, ya no lo
es tanto. Por lo bajo, la mayoría confiesa estar esperando al príncipe
azul (o a un sapo que se le parezca). Casi todas soñaron un cuento
distinto, fantasearon con sumar otro apellido y viven convencidas que el
"happy ending" sólo tiene sentido si hay un hombre al lado. Y un par de
hijos (más de dos en lo posible).
Conozcamos a una.
Martina, la amiga de mi amiga
"¿Sabés cuál es la mejor forma de atraer a un pelotudo?. No es difícil.
Sólo tenés que tener mi cara y mi nombre. En serio te digo, son mi
especialidad".
La amiga de mi amiga me dijo eso un sábado muy de noche, después de
mucha cerveza. Y enseguida aceptó el desafío: un repaso por el catálogo
de tipos olvidables que conoció en los últimos tiempos. Un recorrido por
los fóbicos, inseguros, manipuladores, sensibles, celosos, enfermos,
desorientados, amargados y desdichados que no la llevaron a ninguna
parte. O mejor dicho, al lugar en el que está ahora: esperando a que
aparezca el próximo.
Hace exactamente cinco años la amiga de mi amiga tuvo un día horrible.
Salió de la redacción a las seis de la tarde, pasó por un kiosco,
compró dos chocolates, llegó a su casa a las seis y media, llamó a su novio
para saber si estaba muy retrasado, a las siete de la tarde le abrió la
puerta del departamento y media hora después escuchó esto:
-"Sabes qué?...quiero separarme...no la estoy pasando bien, vos, en el
fondo, tampoco...".
La amiga de mi amiga tiene 37 años y hace cinco años estuvo dos semanas
llorando 16 horas por día. Lloró por el futuro marido que acababa de
perder, por los hijos a los que ya les había puesto nombre, por la boda
que no iba a ser, por la incertidumbre que se venía, por las
explicaciones que iba a tener que dar, por lo que le habían prometido y ya no
iban a cumplir.
Lloró hasta que ya no pudo.
Hasta que apareció Marcos.
¿Saben cómo era Marcos?: perfecto. Sin compromisos, adulto, maduro,
autónomo. Por eso la relación duró exactamente un año, que puede
dividirse en tres etapas.
Etapa uno: acercamiento, enamoramiento, compañía, salidas, amigos.
Etapa dos: Marcos se asusta un poco, empieza a distanciarse, reclama
espacio para él.
Etapa tres: Marcos decide que no quiere otro compromiso, ni hijos por
ahora, ni nadie que lo controle ni lo presione. Marcos desaparece.
Marcos era perfecto, pero tenía otros planes.
Esta vez la amiga de mi amiga decidió no llorar y empezó a chatear.
Conoció a un pibe, se hicieron amigos, luego amantes, después conoció a
otro, tomaron un café, no pasó nada, después conversó con otro, lo
conoció, le gustó y no lo vio nunca más. Y entonces cambió el chat por las
fiestas. Y empezó a ir a fiestas casi en forma compulsiva. Fue a
cumpleaños de gente que no conocía, a encuentros de periodistas sin trabajo,
de amigos, de amigos de amigos. Probó de todo. Fue ingenua en fiestas
recatadas, fue accesible en fiestas de solos y solos, fue amigable en
aniversarios, fue sensual en fiestas de treintañeros y fue todo lo que
le pidieron que sea. Buscó y no encontró nada. Y con nada se quedó.
¿Saben qué? La amiga de mi amiga está buena. Es una mina linda,
atractiva. Y eso, según ella misma, le suma más misterio al asunto. "¿Por qué
no encuentro novio entonces?...no soy una tipa fea".
Hipótesis: la amiga de mi amiga es hermosa, pero está desesperada. Y se
le nota. Es imposible conocerla sin sospechar que en la cartera guarda
un velo y un catálogo de vestidos de novia.
"No es que sea muy exigente en lo que busco eh!. Nada, quiero un novio,
un tipo que esté conmigo, que me acompañe, que quiera tener hijos,
que trabaje, que quiera a su esposa...¿es tanto pedir? ¿Por qué antes era
más fácil conseguir marido?".
¿Vieron?. Se le nota. Y ahora, dice, ya no espera a un Brad Pitt en
Villa Crespo. Ahora se hizo experta en buscar y encontrar el promedio.
Panza promedio, aspiraciones promedio, sexo promedio, trabajo promedio,
familia promedio.
El tipo promedio que encontró después de Marcos se llama Gabriel y
tenía un pequeño inconveniente: una ex insoportable.
Gabriel se había separado seis meses antes, tenía dos hijos y muchas
ganas de que lo contengan. La amiga de mi amiga lo escuchó, le tuvo
paciencia, le lavó los calzoncillos, intentó hacerse amiga de los nenes,
mantuvo relación cordial pero distante con la ex de él y nada de eso
alcanzó. "De pronto me vi en una situación que no era para mí. El tipo
quería otra esposa igual a la que había tenido, increíble, en ocho meses
de noviazgo parecíamos una pareja que llevaba 40 años de convivencia.
Me harté, lo dejé y a los seis meses volvió con su mujer, y yo me quedé
sola pensando qué había hecho mal. Hace poco los ví en un
supermercado, comprando pañales ¡Habían tenido otro hijo!y él seguía con la misma
cara de amargado de siempre".
Luego vinieron Diego, un abogado con el que tuvo sexo y nada más;
Martín, un inseguro que la dejó porque no aguantaba los celos; Ricardo, el
hombre más aburrido del mundo y Nico, el último pelotudo. El dueño de
una de las frases más desconcertantes que la amiga de mi amiga escuchó
en los últimos años.
-¿Sabes qué?...para tener hijos y formar una familia yo tengo toda la
vida, puedo ser padre a los 60 si quiero. No es mi culpa que tengas 35
y estés tan apurada".
"Te juro que cuando me dijo eso me sentí un yogur con fecha de
vencimiento...no lo podía creer. Obvio, me deprimí dos meses y ahora me ves
acá...más sola que la mierda, saliendo con amigas el viernes a la noche,
porque el sábado ellas están con los maridos. Yo sigo buscando, alguno
aparecerá y si no, todo bien, me quedaré sola, pero no voy a aguantar
a un pelotudo por no estar sola...bah, ni yo me lo creo...creo que lo
único que me falta ahora es enamorarme de un gay....así la hago
completa ¿no?".
A mi no se me ocurren más que un par de preguntas y un chiste que
escuché en una película.
Las preguntas: ¿Porqué cada vez más mujeres recorren los 30 años sin
pareja? ¿Es una elección? ¿Es una apuesta por el desarrollo personal? ¿O
es que cada vez son menos los que quieren comprometerse? ¿Alguien
conoce la respuesta?.
El chiste: "Después de los 30, las mujeres tienen más posibilidades de
morir en un atentado que de encontrar marido".
Risas. |
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Categoría : Varios | Comentarios[49]
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01 » Jun 2008 |
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Una noche de cacería en el planeta chat |
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La sala de chat de Terra explota de treintañeros. Son casi las 11 de la noche, es sábado y "Tetona 234" no se anda con vueltas.
"¿Alguien con ganas de pasarla bien?" pregunta. Dos segundos después es la más solicitada.
-¿De dónde sos? pregunta un tal "fachitanqn".
"Tetona..." no responde.
-Yo de Pilar, 30 años, fogoso, propone "Andy2".
"Tetona..." sigue sin responder.
-"Dale...no seas histérica, vos empezaste", se impacienta "Nenedemama".
Pero el mutismo de "Tetona…" continúa y a esta altura ya provoca conjeturas.
-Seguro debe ser un pajero que anda jodiendo....", se enoja otro.
"Tetona..." sale de la sala. Y el misterio queda flotando.
En el mundo del chat no hay reglas. Cada uno dice, piensa y hace lo que quiere. Es la anarquía total en la que sólo una cosa se respeta: la división por edades y orientación sexual. Con eso no se jode. ¿Salas? Hay de heteros, de lesbianas, de gays, de bisexuales, hay de swingers, de divorciados, de casados, de cuarentones, de veintañeros, de maduros. Y todas están repletas. Acá la gente no se anda con vueltas. Al menos en apariencia, y en definitiva de eso se trata todo esto.
¿Será cierto que en el chat se cocinan las nuevas relaciones entre treintañeros? ¿Será cierto que el chat reemplazó al boliche a la hora del levante? ¿Que en este mundo virtual la gente se libera y pasa a la acción más rápido que en la realidad?.
Veamos que hay.
Sala Ellas y Ellos. Sexo virtual. Pruebo una conversación privada. "Mechu" parece una buena opción.
-Hola.
Al segundo y medio, "Mechu" responde.
-Hola, ¿cómo te llamas? yo, acá, sola, aburrida, sos de Roca??????"....
"Mechu" parece desesperada. No le respondo.
-Estassssss????? ¿Te fuiste????????
Le respondo. Tímido, sabiendo que es un error.
-Hola...si, de Roca...todo bien?
-¿Siii..aburrida...qué edad? en pareja? solito?
-...¿No salís esta noche?
-No, mis amigas con los novios...no podían...me quedo en casa...vos salís?
-....no sé, por ahí... a dar unas vueltas
-Ah...decime dónde vas a estar y por ahí nos cruzamos
-......
-("Mechu" manda un zumbido")
-....
-Holis....estás....
No. No estoy más. Ahora pruebo con "Sil y Labri", que juegan a hacerse las lesbianas en una sala para heterosexuales. Exito garantizado.
-¿De donde son?
-De Barracas
-¿Son pareja?
-Nop, amigas
-¿Son lesbianas en serio?
-Si....por?
-...por nada....pregunto. ¿Tienen cam?
-Nop
-¿Fotos?
-Nop
-¿Y qué carajo hacen en el chat?
-Andá a cagar....
Salgo y entro con otro nick. Ahora pruebo con "Morena aburrida". Le propongo una charla privada. Acepta. Tiene 38 años, es separada, con hijos adolescentes, profesional, dice. No busca sexo, busca "alguien para conocer, charlar, contarle mis cosas". En resumen, "Morena aburrida" está sola. Y cuenta: "Estoy medio podrida del chat, acá la gente sólo busca sexo, hablan sólo de eso, hay muchos casados que se hacen pasar por solteros, te tienen días chateando y después se sinceran...pero ya te hicieron perder dos semanas de conversación...yo no les doy bola, no me engancho".
-Pero habrá de todo supongo...
-...Si, yo tengo amigas que encontraron novio en el chat...pasa que tenés que pasarte todo el día para charlar con alguien interesante...en general buscan otra cosa...hay de todo...
-¿Alguna vez te encontraste en persona con alguien con el que chateaste?
-Si...con dos, un fiasco...habían mandado fotos que nada que ver, re verseros...no pasó nada.
-Si...pasa mucho eso.
-Y ¿vos qué buscas?
-....
-Dale, contá....¿qué buscás?
Ya son las 3 y media de la mañana y hasta ahora nada del otro mundo. Pruebo en la sala de los swingers. No estoy en pareja, pero "papiymami" no lo saben. Les digo que estoy interesado, me piden mi mail para mandarme fotos, les paso una dirección, me las mandan. Tendrán unos 38 años, no se les ve la cara, apenas la panza a él y las tetas a ella. Les digo que no, que la próxima vez será. Les pido que me cuenten. Y cuentan: viven en Neuquén desde hace dos años, por trabajo, son swingers desde que se conocieron, pero en la zona les cuesta conseguir parejas. En el chat conocieron a un par, pero no es lo que buscan. "Acá la gente es medio pajera...los chabones se quieren curtir a tu mujer, pero están viendo qué haces vos con la de ellos...así no es la cosa....".
-¿Y cómo es la cosa?
-No sé...¿querés conocernos y ver por tu cuenta?
Salgo otra vez. Me voy a Patagonia Gay y acá el intercambio parece más urgente. Aparece "Madurito" y me pregunta la edad.
-30...
-Ah...todo bien, pero buscaba a alguien más chico
Ok. Me dedico a leer lo que escriben y esto se transforma en un festín homoerótico. "Javi" y "Leo" se pasan los mails. Van a chatear, seguro se encontrarán. Entra "roxxxense". Pregunta si hay alguien de Allen o con auto. Nadie responde. "Alecentro" es de Esquel. Hace media hora busca conversación, pero no tiene suerte. La sala está llena de neuquinos y cipoleños. El otro que reclama atención es "Morochon", pero exige fotos o cam. "No pierdan el tiempo si no muestran nada", advierte. "¿Alguien para charlar?" pregunta un reginense que dice llamarse Pablo. El intercambio es frenético, pero se ve poco: todos se pasan los mails y continúan la charla en el msn de Hotmail. Pablo espera dos minutos y se va.
Y yo me voy con el.
Ultima escala, cinco de la mañana, tengo sueño. Entro a Uol. La pelea entre "Pendejacalentona23" y "Ladiablaagain" está al rojo vivo. Resulta que "Pendeja..." escribió que busca "papitos con cam para mostrarce para mi". "Ladiabla..." reaccionó y le dijo que así no es escribe mostrarse. Y empezó la puteada.
Ahora "fantasiosa" toma la iniciativa.
-Yo también tengo cam...querés ver?
Le paso mi msn. Dos minutos después, "Fantasiosa" me agrega y me muestra cómo le marca la cola un jean ajustado. Debe tener 40 años y un espíritu exhibicionista que ya no sorprende.
-¿Te gusta? ¿querés ver más?
-En realidad tengo sueño...me voy a dormir
-¿En serio no querés ver más?
-No, gracias...
-Hubieras avisado antes pelotudo
Se desconecta. Se va, enojada, puteando.
"Fantasiosa" busca sexo. Y yo no sé cómo explicarle.
¿Cuál es la mejor historia que conocés del chat? |
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Categoría : Varios | Comentarios[35]
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