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Cada 4 minutos, alguien es asesinado en América

El tráfico de armas alimenta la muerte

La droga es el gran financista del delito

Para las familias de las víctimas, los 140.000 homicidios que se cometen anualmente en América Latina son un drama. Pero, para algunos, son un negocio que moviliza millones de dólares Es que, detrás de cada crimen, hay una red de traficantes, policías o militares corruptos e intermediarios inescrupulosos que venden o alquilan las armas que utilizan los delincuentes en sus rodeos de violencia. El tráfico de armas constituye el principal obstáculo para luchar contra la violencia América Latina está pagando ahora los resultados de la extraordinaria proliferación de armas que hubo en la región durante los "años de plomo", globalmente de 1970 a 1990: muchas de las armas que estuvieron en manos de las guerrillas o de los ejércitos regulares pasaron a la delincuencia común La policía brasileña destruyó recientemente un lote de 5.000 armas capturadas a los narcotraficantes, que incluía fusiles de guerra, ametralladoras, granadas y bazookas. Gran parte de ese arsenal procedía de los depósitos militares de un país vecino El mercado de armas es muy complejo e involucra a varios actores de la sociedad, incluidos policías, militares y políticos En los últimos años, incluso, los grandes delincuentes comprendieron la ventaja que representaba controlar también el contrabando de armas. El narcotraficante brasileño Fernandinho Beira Mar, a pesar de estar encarcelado, es también el mayor contrabandista de armas del país, que según una investigación de la policía , le vendió armas incluso a la guerrilla colombiana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). En 2000, Beira Mar facturó 10 millones de dólares, aseguran.

La proliferación de armas de fuego que se produjo en América Latina en los últimos años provocó dos fenómenos de extrema gravedad: la letalidad de los delitos y un aumento de la posesión de armas por parte de los civiles Mientras que en el mundo sólo 63% de los homicidios se cometen con armas de

Brasil

A fines de los '70, el famoso narcotraficante peruano "Mosca Loca" (Guillermo Cárdenas Dávila) se ufanó de tener tanto dinero como para pagar la deuda externa del Perú, que ascendía a 25.000 millones de dólares. "Mosca Loca" murió quemado en un motín carcelario en 1984. También el capo colombiano Pablo Escobar formuló una propuesta similar en 1985.

La relación entre el tráfico de drogas y el aumento que registra la violencia en América Latina durante los últimos años quedó en evidencia desde que aparecieron carteles o bandas perfectamente ensambladas, con ramificaciones internacionales, y que no les tiembla el pulso cuando deben matar para defender un negocio que moviliza cientos de millones de dólares al año. "El vínculo entre las drogas y la violencia mayormente no se da por el efecto farmacológico de las drogas sobre el comportamiento, sino por conflictos generados por la venta de drogas", de acuerdo a un estudio realizado por Andrew Morrison y Mayra Buvinic para el BID . Esos episodios comprenden "disputas entre carteles, conflictos entre vendedores y compradores, y delitos cometidos con el fin de recaudar fondos para la compra de drogas", agregan Colombia se convirtió durante los '80 en cuna de poderosos carteles de droga que se impusieron mediante el terror y disputaron o se asociaron con las guerrillas para mantener el control de las zonas productivas y el posterior narcotráfico. En las favelas de Río de Janeiro surgieron réplicas de Escobar, como Fernandinho Beira Mar. Los narcos de Río facturan casi 300 millones de dólares anuales por la venta de 6 toneladas de drogas . La cocaína multiplica su valor desde la producción hasta el consumo. Un kilo de coca en Bolivia se compra a 1.200 dólares, cuando transita por en Argentina cuesta 5.000 y en Europa se vende al minorista a de 45.000 a 60.000 dólares.

Río: playa, caipirinha y balas

Cuando llegan a Río de Janeiro, los turistas sueñan con disfrutar del sol tropical, ver sublimes 'garotas' en las playas, bailar al ritmo del samba y beber 'caipirinha'. Pero, con frecuencia, la realidad les propone un rostro más cruel: muchos extranjeros suelen ser asaltados en la calle, a plena luz del día, frente a decenas de testigos que no se inmutan Todos los días los noticieros de televisión y las primeras páginas de los diarios despliegan imágenes aterradoras: una niña muerta a la salida del metro, una estudiante baleada en las puertas de la universidad, autobuses quemados y vías bloqueadas por narcotraficantes que se enfrentan a balazos, comercios cerrados por amenazas y turistas asaltados y hasta asesinados En esta urbe de 6 millones de habitantes, ícono del turismo latinoamericano, se comete un promedio de 2 homicidios diarios. En 2001 se contabilizaron 763 crímenes, según el más reciente informe del Consejo Nacional de Seguridad Pública. Tan grande es la violencia que está cercando a la denominada 'ciudad maravillosa' que no sólo ahuyenta a los extranjeros. También espanta a sus propios habitantes: 55% de los cariocas confesó su deseo de emigrar. Casi la mitad de la población 41% vive con miedo.

Jóvenes: 'poder y zapatillas'

Los jóvenes se han convertido en las principales víctimas y victimarios de la violencia en América Latina.

"Alrededor del 28,7% de los homicidios en América Latina se dan entre jóvenes entre 10 y 19 años de edad ", asegura un estudio de las investigadoras Katherine Weaver y Matilde Maddaleno de 1999. En 10 países el homicidio "es la segunda causa de muerte en este grupo de edad", aseguran.

Entre los factores que inducen a los jóvenes a la violencia, están altas tasas de desempleo juvenil, la impunidad que permite el sistema judicial, y el acceso fácil a alcohol, las drogas y las armas de fuego "Una cuarta parte de los jóvenes entre 15 y 20 años de edad ni trabaja ni estudia ", indica Briceño. "Tienen todas las expectativas del sofisticado consumo moderno, pero ninguna de las posibilidades de lograrlo por las vías legales. ¿Qué puede hacer un joven sin estudio ni recursos, que quiere comprarse zapatos de marca y salir con su novia?", agrega.

Casi respondiendo, Silvina, 'reina de los bandidos' de 15 años que lidera una banda de secuestradores en Argentina, confesó hace poco a un programa de tevé que delinque para "sentirse poderosa" y para comprar "ropa y zapatillas". Silvina huyó 4 veces de institutos y conoció las armas y la marihuana a los 9 años.

Caracas, armada

La tradición de la autodefensa ha convertido a Venezuela en tierra de nadie, donde la ley otorga inmunidad al ciudadano que mate a otro para hacer frente a la delincuencia Un centenar de personas son asesinadas cada fin de semana en los barrios pobres de Venezuela. Más de la mitad de las víctimas se registran en Caraca Autoridades y expertos admiten que un gran porcentaje de los ciudadanos llevan consigo sus armas en las calles e, inclusive, se producen intercambios de disparos por discusiones entre automovilistas. El uso de armas de fuego en Caracas pasó de 30,8% en 1960 a 90% en la actualidad, según el criminalista Elio Gómez Grillo. "Venezuela nunca había estado tan armada como ahora", aseguró Ante el alto índice de homicidios -en este semestre hubo 900 por mes-, los venezolanos optaron por vivir armados y ajusticiar por mano propia a los delincuentes.

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