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Los rionegrinos pagaron sobreprecio por la energía durante cinco años

Se estima que a cada usuario del servicio ese adicional le significó 225 pesos.

Los mayores valores pagados determinaron un desembolso extra de 34 millones.

Miguel Saiz en un alto en la sesión del viernes que terminó en las primeras horas de ayer. Tras una dura jornada se escuchó un detallado informe de las cuatro operaciones eléctricas.

La renegociación de la provincia de Río Negro por el precio de la energía con la generadora Turbine Power, determinó un sobrecosto que originó un pago adicional de 34 millones de dólares en un plazo de cinco años.

Ese monto -mayoritariamente- lo pagaron los rionegrinos y representó 225 pesos por cada usuario de energía.

Aquel perjuicio público constituye una conclusión de la Comisión Investigadora de la Legislatura, en relación a la operación de Río Negro con la Turbine Power y su posterior modificación de costos de compra de energía.

La Comisión informó de un perjuicio de 5.400.000 pesos por la venta de regalías hidroeléctricas y luego analizó otras dos operaciones: la fusión de Edersa y Sodielec, y el funcionamiento de Transcomahue.

En todos los casos, el informe -que fue respaldado a la madrugada por unanimidad en la Legislatura- es crítico en relación a las cuatro operaciones, con denominadores comunes: la responsabilidad institucional y funcional centrada en el gobernador Pablo Verani y el ex ministro Horacio Jouliá. Además, califican de ineficiente a la labor de los órganos de control.

El mayor trabajo se centró en la renegociación con la Turbine, en el cual, la comisión concluyó que el Estado favoreció un sobre costo de energía que luego pagaron los usuarios. También, afirmó que esos valores mayores determinaron un pago de 34 millones de pesos (o dólares) más de lo que correspondía según el contrato original.

Miguel Saiz en un alto en la sesión del viernes que terminó en las primeras horas de ayer. Tras una dura jornada se escuchó un detallado informe de las cuatro operaciones eléctricas.

La comisión no avanza en este aspecto, pero un análisis lineal permite un dato práctico: los 34 millones abonados en los cinco años (hasta diciembre del 2001 que la Justicia trabó su traslado al precio final) fueron afrontados por el Estado (ERSA) pero, mayoritariamente, por los usuarios de Edersa. Ese sobrecosto se lo podría resumir en que cada usuario rionegrino abonó 225 pesos de más en sus boletas de energía en los cinco años.

La comisión planteó que "los órganos de la provincia que tienen la responsabilidad funcional de velar por la intangibilidad de los derechos de los usuarios" deberán decidir qué hacer "para restablecer un equilibro perdido en desmedro del interés público y en beneficio de la ilegítima ganancia de una empresa que lo obtuvo más allá de lo permitido".

El informe de la relación entre Río Negro y la Turbine -que leyó el presidente de la comisión, Fernando Chironi- bien se podría resumir en los siguientes puntos:

• La Provincia "ejecutó un programa" eléctrico con la Turbine que asegurara el "suministro a un precio que en ningún caso podría ser superior" al vigente en el Mercado Eléctrico Mayorista.

• Pero, este "programa sufrió distorsiones desde su inicio. Sólo se presentó un oferente a la licitación y se modificó "el plazo contractual originariamente previsto, llevándolo de 15 a 20 años".

• Se profundiza en las normas que "innecesariamente" permitieron "la alteración de la ecuación económica financiera del contrato" que relacionaba a la ERSA (provincia) con la Turbine.

• "La tarifa que debieron abonar los usuarios entre fines de 1996 y 2001 fue notoriamente superior" al Mercado Eléctrico. "O sea -que se construyó una central de generación térmica (como la Turbine) para conseguir precios más bajos" que ese mercado y "se terminó comprando a un precio superior, en desmedro de los derechos de los consumidores".

• Este incremento ocurrió porque "el Estado modificó el precio de la energía suministrada, estableciendo una tarifa que derribó la esencia del contrato de abastecimiento" de la Turbine - el techo o tope del 98 por ciento del precio del MEM - y "generó un sobrecosto que debió ser soportado por la ERSE durante 1996".

• Ese contrato luego se sumó a la concesión y posibilitó a Edersa ese traslado "a la tarifa del costo íntegro del abastecimiento" de Turbine, contrariando a las disposiciones del marco regulatorio. "Los usuarios rionegrinos durante un lustro pagaron en la tarifa un costo de energía superior al tope establecido en el marco regulatorio eléctrico. (AV)

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