Jueves 17 de julio de 2003

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Azúcar se fue: no hay que llorar que la vida es un carnaval

 

Ayer murió en Nueva Jersey Celia Cruz. La cantante cubana tenía 78 años. Padecía un cáncer cerebral desde el año pasado.

 

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Una postal de la cantante, amante de las pelucas, los anteojos y los colores alegres.

NUEVA JERSEY.- "La reina de la salsa", "La Guarachera del Oeste", "la azúcar más dulce y vigorosa" falleció ayer, a los 78 años de edad, víctima de un cáncer cerebral.

Celia Cruz murió poco después de las cinco de la tarde en su casa en Nueva Jersey, acompañada de su esposo, Pedro Knight.

La cantante recibió quimioterapia y fue operada del cerebro en diciembre del año pasado. Después de ello su estado general se deterioró y en sus últimos días estuvo recluida en cama Finalmente, entró en un coma el martes, del cual no despertó. Y con ella, el trono de la salsa quedó vacante.

A lo largo de su carrera, la cantante de las pelucas extravagantes, los trajes coloridos y la sonrisa perenne grabó más de 70 discos. Ella solía bromear con que tenía uno por cada año de su vida Hoy, el mundo de la música se viste de luto, se saca el sombrero y la recuerda con una sonrisa, viviendo la vida "como un carnaval".

Es más bello vivir cantando... 

Caridad Cruz Alonso, habanera del barrio de Santos Suárez, aparentemente nació el 21 de octubre de 1924. Con su coquet personalidad, es lógico que ella ella nunca confirmara ni desmintiera esta fecha Celia Cruz fue una de los cuatro hijos de Catalina Alfonso y Simón Cruz. Su padre quiso que fuese maestra de escuela, pero sus intereses eran muy diferentes En 1947, se alistó en el Conservatorio Nacional de Cuba, donde estudió teoría musical, voz y piano. Su carrera artística comenzó rápidamente en La Habana tras ganar varios concursos radiales.

En 1950, se incorporó como vocalista a "La Sonora Matancera", orquesta con la que recorrió toda Latinoamérica y en la que conoció a su marido por más de 50 años, el trompetista Pedro Knight En aquel entonces, Cruz comenzó a desarrollar un estilo muy particular de interpretar el son cubano. Junto con "La Sonora", la cantante abandonó Cuba en julio de 1960 Nota aparte, esa fue una de las grandes tristezas y broncas de su vida. El abandonar Cuba tuvo sus consecuencias: Fidel Castro no permitió que asistiera al entierro de su padre dos años después de partir.

De hecho, su música no se escucha oficialmente en la isla desde hace más de 40 años, pero sus grabaciones se difunden de manera privada por todo el país y la cantante sigue siendo muy querida por los cubanos Volviendo a sus comienzos musicales, "Azúcar" tuvo su primer éxito con "Cao cao mani picao". Cantaba de todo -incluso grabó rock and roll- pero se especializó en guarachas, por lo que pronto se la conoció como "la guarachera de Cuba" Sus inicios en el movimiento de la salsa los marcó su colaboración en la "salsópera" de Larry Harlow, representada en el Carnegie Hall de Nueva York en 1973. Allí interpretó el personaje de "La Gracia Divina".

Su aporte a la expansión del "boom" de la salsa fue fundamental de la mano de las orquestas a las que sumó su potente voz, entre ellas, las de Tito Puente, Willie Colón, Ray Barretto, Pappo Luca y Johnny Pacheco De personalidad extrovertida, Celia siempre se mostró abierta a nuevas experiencias. Así, participó en la película "Los reyes del mambo" y en varias telenovelas mexicanas.

Grabó con músicos tan diversos como David Byrne y Wyclef Jean, con el grupo nacional los Fabulosos Cadillacs y con los españoles Jarabe de Palo Cosechó innumerables reconocimientos, entre ellos cinco premios Grammy y dos premios Grammy Latino. Obtuvo numerosos discos de oro y platino por millones de copias vendidas en todo el mundo En 1994, en la cumbre de la fama, quedó consagrada al recibir de manos del entonces presidente estadounidense, Bill Clinton, el premio National Endowment for the Arts, el reconocimiento mas alto que este país concede.

Que le den candela

A pesar de haber vivido tanto tiempo en Estados Unidos -tenía fijada su residencia en Nueva Jersey- y de disponer de pasaporte estadounidense, apenas hablaba inglés. Le bastaba su grito de guerra "azúcar!" para hacerse entender en todo el mundo.

Su salud comenzó a declinar en los últimos meses de 2002. En diciembre de ese año fue operada de un tumor en el cerebro En febrero se había recuperado lo suficiente como para acudir a la entrega de los Grammy, en la que ganó el premio al mejor disco de salsa por "La negra tiene tumbao".

El 13 de marzo de este año, la comunidad latina de Estados Unidos le rindió un grandioso homenaje en el Teatro Jackie Gleason de Miami. En aquel entonces, Celia derrochó optimismo, pidió a sus admiradores que recen por ella y no quiso en ningún momento que el homenaje fuera como una despedida Más allá de su talento, la reina de la guaracha y el guaguancó fue poseedora de una sencillez increíble y una alegría contagiosa, las características que distinguirán siempre a esta artista que escribió uno de los capítulos más importantes de la historia musical en el mundo.

Azúcar será velada hoy en Miami por expreso deseo suyo y, enterrada en Nueva York "Pidió que se la velara en Miami porque es una de las ciudades que la quiso mucho y por ser un pedacito de Cuba", dijo uno de los allegados a la familia. (DPA/Reuters)

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