Menem encabezó ayer un acto en el club González Catán, de esa misma localidad. Insistió en que no se bajará.

A cinco días del ballottage, la eventual determinación del candidato presidencial Carlos Menem de competir o desertar mantiene en vilo a la comunidad política, economistas y empresarios. Pese a las públicas ratificaciones de participar de las elecciones, y a la oficialización que realizó ante la justicia la posibilidad de que dé un paso al costado continuó ayer circulando con fuerza. Es que todas las encuestas coinciden en que tiene la derrota asegurada.
Si bien la versión de que "se baja" fue utilizada por el gobierno (hasta por el propio presidente Duhalde), en el propio entorno del ex mandatario la duda persiste. Uno de sus principales colaboradores, Alberto Kohan, debió admitir la existencia de "disidencias" en el entorno de Menem en cuanto a qué hacer ante el ballottage del domingo próximo.
"Puede haber disidencias, distintos puntos de vista, (pero) quien conduce ha sido muy claro en su decisión, así que por más que haya disidencias u opiniones, por suerte las decisiones las toma Menem", destacó el dirigente.
El propio Menem, públicamente, se enfada cuando se menciona esa posibilidad, aunque su actividad, como el acto que realizó anoche en La Matanza, se ve afectado por los rumores y las encuestas adversas.
El Hotel Presidente, búnker menemista, fue un hervidero de reuniones, en su mayoría de candidatos a nivel municipal, provincial, para darle apoyo al ex jefe de Estado. También se reunió con Kohan, el gobernador riojano Angel Mazza, el empresario Francisco de Narváez, el cordobés Julio César Araoz, el ex secretario de Turismo Francisco Mayorga y el gobernador pampeano, Rubén Marín.
Allí, consideran que están "enfrentados a un gobierno dedicado a la campaña y hay muchas cosas que pasan, como con la moneda falsa: La acuña un bandido y después la echan a rodar los honestos", relató Kohan.
Por la otra vereda, la mayoría de los cuadros del gobierno nacional salió ayer a presionar una definición con distintas variantes argumentales con el fin de acicatear al ex presidente.
El ministro de la Producción, Alberto Fernández, aseguró que en caso de que Menem desista "no pasa nada", y similar actitud mostró el candidato a vicepresidente Daniel Scioli, al negar que Kirchner empiece el mandato como un presidente débil.
Sostuvo que no será el congelamiento del porcentaje de votos obtenido en primera vuelta (22,24%) sino los "resultados de la gestión de gobierno" de Néstor Kirchner el que defina el apoyo de la población.
Sobre la misma base se manejó el jefe de Gabinete Atanasof, quien restó importancia a una eventual deserción de Menem al afirmar que la Constitución prevé esa "contingencia".
El gobernador Solá, y el ministro de Justicia de la Nación, Juan José Alvarez, tuvieron un mensaje más institucional.
Solá pidió a Menem "aceptar las reglas del juego" mientras que Alvarez dijo que el ballottage "es una instancia necesaria que fortalece la democracia".
La primera dama, Hilda "Chiche" Duhalde, dijo no creer que Menem se baje del ballottage. Su esposo, el Presidente, había dicho que Menem "pierde por nocaut o por abandono" y el sábado pasado le puso fecha a su caída: un día antes del ballottage.
Para el senador Eduardo Menem, el gobierno fogonea la renuncia para que Kirchner, a quien calificó de "subordinado" de Duhalde, "suba al gobierno con el menor poder posible y así controlarlo". "No veo otra razón para hacer una campaña tan nítida para estimular a un candidato a que se baje de su candidatura". (DYN/Redacción Central)

Acusó a Duhalde de "robarle" la elección

El candidato del Frente por la Lealtad, Carlos Menem, ratificó anoche que no declinará su postulación para el ballottage: "ni lo piensen", advirtió, y acusó al oficialismo de haberle "robado" la elección en Buenos Aires.
"Los que vienen pensando que en algunos de estos actos yo me voy a bajar de la candidatura, ni lo piensen: no saben de la fibra de la que está hecho uno", afirmó Menem.
El ex presidente embistió luego contra el oficialismo al decir que en la provincia de Buenos Aires "nos robaron (en la elección del 27 de abril), esa es la verdad, pero no nos van a volver a robar", agregó.
Sin embargo, Alberto Kohan admitió que existen "disidencias" en el entorno del riojano en cuanto a qué hacer ante el ballottage, pero recordó que "lo importante es que decide el que conduce" y que allí "se termina toda la discusión". "Puede haber disidencias, distintos puntos de vista, (pero) quien conduce ha sido muy claro en su decisión, así que por más que haya disidencias u opiniones, por suerte las decisiones las toma Menem", destacó.

Hoy vence el último plazo

La Junta Nacional Electoral oficializará en las próximas horas las fórmulas presidenciales que el domingo competirán en segunda vuelta, ya que el binomio Carlos Menem- Juan Romero y el tándem Néstor Kirchner- Daniel Scioli ya reportaron a la Justicia que participarán del ballottage.
Y lo hicieron antes de que la Asamblea Legislativa proclamara a los vencedores de las elecciones presidenciales del 27 de abril.
Los candidatos debían ratificar su voluntad de competir en la segunda vuelta electoral luego de la sesión que la Asamblea celebró el jueves pasado y en un plazo que vencerá hoy.
Sin embargo se adelantaron a presentarse ante la Junta, que ahora debe decidir si oficializa las fórmulas. La Junta está integrada por la juez electoral María Servini de Cubría y los camaristas Leopoldo Montes de Oca y Pablo Fedreani.
Ayer Servini rubricó el acta que oficializa a las dos fórmulas. (DYN)