Domingo 11 de mayo de 2003

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"Haré un gobierno de consenso, pero sin Menem"

  En la recta final de la campaña,la pelea Duhalde-Menem es cada vez más intensa
  El presidente insiste: "Menem renunciará"."Tiene miedo de perder", le retrucó el riojano.
  BUENOS AIRES.-El presidente Eduardo Duhalde jugó todas las fichas para asegurar un triunfo de Néstor Kirchner en el ballottage del próximo domingo 18 frente a Carlos Menem, ordenando el apoyo institucional y político por parte de la mayoría de sus ministros. La decisión de poner a su gobierno detrás del gobernador santacruceño y candidato oficial, tiene como principal objetivo el fin de la carrera política de su mayor enemigo, que en este turno busca llegar a la Casa Rosada por tercera vez.
Precisamente, el primer mandatario dijo ayer que se siente "convencido" de que Menem "no se va a presentar" para competir en el ballottage del domingo 18 y remarcó que su predicción la va a confirmar "el sábado que viene", justo un día antes de la elección. Inmediatamente, desde Bahía Blanca -en otra escala de su campaña-, el ex presidente se vio una vez más obligado a desactivar los rumores sobre su posible renuncia y en su contraataque volvió a apuntar sus dardos a Duhalde, de quien dijo que "está asustado y tiene miedo".
Es que temprano, Duhalde había afirmado en su programa radial "Conversando con el presidente" que si Kirchner "es elegido para gobernar" el país, "no voy a participar" del futuro gobierno y sólo lo apoyará "como un ciudadano más". Y salió también al cruce de las acusaciones del riojano, quien lo fustigó por participar de la campaña electoral en favor del candidato patagónico.
"Se molesta el ex presidente porque dice que participo en la campaña electoral, pero me veo permanentemente incluido en la campaña en spots televisivos", respondió Duhalde al justificar sus declaraciones del jueves último cuando vaticinó que Menem perdía en el ballottage como en un ring de boxeo: "por abandono o por nock out".
La pela mediática entre los dos caudillos peronistas llegó ayer a un punto de alta tensión.
De todos modos, el propio compañero de fórmula de Menem, el salteño Juan Carlos Romero, lejos estuvo de ser contundente en una negación de rumores y hasta admitió como cierta la teoría de una posible declinación del ex mandatario a su candidatura. Así, Romero sólo dijo que había "una carga emotiva negativa contra Menem".
Distinta fue la aparición pública de Alberto Kohan, quien rechazó cualquier posibilidad de renuncia a la segunda vuelta: "que ni lo sueñen, Menem irá al ballottage el domingo que viene".(ver recuadro)
Para algunos analistas, hay un denominador común en la actitud de Menem tras la primera vuelta del 27 de abril, y es su incapacidad para poder comprender la realidad que le es esquiva. Como nunca, el riojano ha errado sus pasos tratando a los tumbos de descontar la "ventaja" que todas las encuestas coinciden en darle a su rival. Inclusive, el viernes reconoció por primera vez que estaba "entre 10 y 12 puntos" abajo de Kirchner.
Además, durante la semana pasada, el ex jefe de Estado enfocó su discurso a sembrar dudas sobre la posibilidad de un fraude en los comicios del 27 del mes pasado.
Con ese marco, el menemismo había anunciado que iría a la Justicia para que se investiguen las supuestas irregularidades denunciadas, pero tuvo que volver sobre sus pasos cuando las acusaciones involucraron a algunos hombres de su entorno. Y la denuncia quedó en la nada, con un final abierto, pero para el domingo que viene en las urnas.
Ayer, desde Río Gallegos, Kirchner, el candidato del Frente para la Victoria (que ya cosechó el respaldo del presidente de Brasil, Lula da Silva, y de Ricardo Lagos, de Chile), pidió a sus colaboradores que acepten con "caridad cristiana todas las cosas que se van a decir hasta el jueves", al advertir sobre una campaña en la que será "agraviado, injuriado y descalificado" por sus adversarios de cara al 18 Dijo que los ataques vendrán de "aquel viejo fantasma del pasado, que está muy nervioso". (DyN/Télam).

"Más no se pudo hacer"

El presidente Eduardo Duhalde aseguró que no le dejará al próximo gobierno "un país ingobernable" y descalificó los dichos de Carlos Menem, quien lo responsabilizó de la caída de la administración De la Rúa. "No voy a tener la tentación de dejarle al próximo gobierno, sea quien sea, un país ingobernable, hay que trabajar paso a paso y resistir la tentación de repartir una riqueza que no se crea", sostuvo Duhalde, antes de participar de la inauguración de la XXII Fiesta Nacional de la Ganadería de las Zonas Aridas en la localidad mendocina de General Alvear. Reiteró que su gabinete "no tuvo ninguna denuncia por corrupción ni farándula" , y manifestó que "he hecho lo máximo que he podido, nos tocó la peor etapa económico y social de la Argentina". El jefe de Estado sostuvo que "me voy contento con la posibilidad cierta de tener una Argentina productiva; más de lo que hice no puede hacer", concluyó. (Télam)

La mira está en Buenos Aires

Distintos operadores del menemismo aseguraron ayer que Carlos Menem se presentará al ballottage del domingo 18 de mayo, y levantaron nuevas sospechas de que el gobierno nacional quiere ensuciar la campaña en la provincia de Buenos Aires.
Alberto Kohan sostuvo que si el ex mandatario "ha dicho absolutamente sí" no hay que dudar de que se participará de la segunda vuelta electoral con Néstor Kirchner, respondiéndole así al presidente Eduardo Duhalde que sugirió que no lo haría. Adrián Menem consideró, en tanto, que son "versiones que echa a correr el gobierno" y anticipó a modo de desafío que "nos veremos la cara el 18 de mayo, cuando se abran las urnas, se empiecen a contar los votos y los argentinos decidan en qué país quieren vivir".
Por su parte, el candidato a la vicepresidencia por el Frente por la Lealtad, Juan Carlos Romero, confió en ganar el ballottage con el "voto racional" de la gente, aunque admitió que "hay un contenido muy grande de votos en contra de Carlos Menem". También acusó al duhaldismo de estar induciendo a "pasiones negativas" similares a las que utilizó la Alianza en la campaña de 1999, sobre con el "nivel bajo de la política al que nos tiene acostumbrado la gente de la provincia de Buenos Aires".
Alertó, asimismo, que en la provincia de Buenos Aires "le está diciendo a la gente que si no votan al candidato del gobierno, le van a retirar los planes (sociales) y que le sacaban fotos en el cuarto oscuro". Romero insistió en que Kirchner no está ganando en las encuestas como se dice, ya que "ninguna le da una gran adhesión de votos, sino que hay un contenido muy grande de votos en contra de Carlos Menem, que no es lo mismo. No es la primera vez que hay una oleada o tendencia masiva inducida por una pasión negativa", sentenció. (DyN)

   
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