Con menos glamour y más críticas

En un clima de distensión, Menem quiso dejar en claro que no tiene rencores y que el "odio" es de sus adversarios. Reiteró que no piensa bajarse del ballottage y culpó al gobierno por las versiones.

Menem pasó con cierta incomodidad las preguntas "a boca de jarro" que le lanzó Mirtha. Al final hubo brindis.

Enojado con sus rivales políticos, un tanto nervioso y un poco más distendido sobre el final, Carlos Menem fue el único invitado de ayer a los tradicionales almuerzos que conduce Mirtha Legrand, quien se animó a "retarlo" porque no participó en el ciclo antes de la primera vuelta.
Allí, Menem reiteró que no piensa bajarse del ballottage, versión que atribuyó a "una maniobra del gobierno", dijo que sus enemigos "demonizaron" su figura y consideró "absurdo que todavía estemos con antinomias".
Volvió a expresar su pensamiento en materia de seguridad, proponiendo que Gendarmería y Prefectura sean las encargadas de combatir el delito y que los militares sean trasladados a la frontera.
Al insistir con sus acusaciones de "debilidad" a la actual administración, Menem dijo que "si no se gobierna, no se termina con esta situación de violencia", y recordó a los cuatro efectivos policiales, "que fueron -dijo- acribillados" ayer.
Señaló que las fuerzas represivas deben "atacar al delincuente, buscarlo antes de que cometa el hecho delictivo" y en cuanto a los piqueteros, sostuvo que pueden "protestar lo que quieran, pero no cortar el funcionamiento de la ciudad, el tránsito, levantar puentes" y agregó que "aplicar la ley no significa reprimir".
A pesar de que se había anunciado la presencia de Menem con su esposa, Cecilia Bolocco, la ex miss Mundo no concurrió al piso porque le recomendaron reposo por su embarazo, según se encargó de explicar ella misma por vía telefónica.
Sin el brillo que exhibió en otras oportunidades en las cuales fue invitado, muchas de ellas durante su mandato presidencial, Menem trató de hacer llegar durante el programa un claro mensaje a sus seguidores y rivales bajo la premisa de que no piensa renunciar y que está seguro que ganará el ballottage.
Vestido impecablemente con un traje oscuro y corbata rayada al tono, Menem brindó con su anfitriona con champagne y se emocionó cuando habló de su hijo, Carlos Menem Junior, fallecido en 1995, y al comentar su próxima paternidad.
El ex presidente llegó al canal media hora antes del inicio del programa acompañado por sus asesores de prensa y cerca de diez custodios. Al ser el único invitado, tuvo que hablar mucho y pudo comer poco del lomo con salsa agridulce y helado, que se sirvió en el programa.
A pesar de algunas preguntas directas de Mirtha con respecto a la corrupción y a que el candidato reconociera algunos de los errores que pudieron existir durante sus diez años de gobierno, la actriz dijo públicamente que gracias al ex presidente ella pudo volver a la televisión durante la década del `90. Mientras esto sucedía en el estudio 4 de América 2, en la puerta del canal, sobre la calle Gorriti, se había congregado un centenar de militantes menemistas, muchas de ellas mujeres, que esperaron en vano un saludo de su líder partidario.

Confirmó ante la Junta Electoral que competirá

Decidido a mostrar que no desistirá de competir con el santacruceño Néstor Kirchner en segunda vuelta, Menem se presentó ayer ante la Junta Nacional Electoral para confirmar que participará del ballottage junto a su compañero de fórmula, Juan Carlos Romero.
"Se ha puesto en circulación una maliciosa versión según la cual (Menem y Romero) estarían dispuestos a renunciar al ballottage. Esa versión, utilizada hasta por el propio Presidente (Eduardo Duhalde) nos obliga a anticiparnos a los tiempos procesales y dejar establecida nuestra inequívoca voluntad de participar en la elección del 18 de mayo", escribió el abogado Giacosa en la presentación.
Explicó así los motivos por los cuales la fórmula se adelantó a presentarse ante la Junta, ya que en realidad debía hacerlo luego de que la Asamblea Legislativa proclame a los vencedores del 27 de abril. Paralelamente el apoderado radicó una denuncia penal ante la juez federal Servini de Cubría para reportar presuntas maniobras de fraude en los comicios de abril. El menemismo optó por denunciar la presunta falsificación de documentos públicos ante la imposibilidad de reportar irregularidades ante la Justicia Electoral, ya que el plazo para impugnar el proceso del 27 de abril venció 48 horas después del cierre del comicio. Ahora el fiscal Di Lello deberá dictaminar si promueve la acción penal y propone medidas de prueba para investigar.