Lunes 12 de mayo de 2003
  Cáceres corre con cierta ventaja en Centenario
 

Conoce la pista como nadie y marca diferencias.Con el triunfo de ayer es el nuevo líder del certamen.La jornada contó con más de 3.000 espectadores.

 
Rubén Cáceres dejó en claro que quiere el "uno" al final de la temporada. Ayer ganó la serie y la final ante su público, que ya comienza a ilusionarse con el campeonato.
CENTENARIO (AN).- Corrió en casa y por eso el valor de la victoria es mayor. A Rubén Cáceres el autódromo de Centenario le cae bien, porque lo conoce a la perfección y "la sabe lunga" cuando se trata de poner a punto el auto.
Además de mandar en la final, se impuso en su serie y así saltó a la punta del campeonato para abonar su pretensión de "dejar de ser el 2".
Más de treinta autos en pista, una multitud en el perímetro del trazado y una tarde muy agradable, le pusieron los condimentos a esta tercera fecha de un certamen que ha tenido tres triunfadores distintos y que demostró que goza de muy buena salud. Los que festejaron fueron Raúl Favre en la primera, Sebastián Márquez en la segunda y ahora Cáceres.
La organización de la Asociación Automovilística Centenario Competición fue muy buena, se cumplieron los horarios y el piso del circuito resistió bien el tránsito de las máquinas, para despejar las dudas que habían surgido en la semana.
La fiscalización corrió por cuenta de la Federación Neuquina de Automovilismo (FNA).
Los ganadores de las series fueron los animadores principales en la final. Andrés Tomini hizo suya la primera, Cáceres se impuso en la segunda y Pablo Saladino se quedó con la tercera.
En el lanzamiento de la carrera, Cáceres quedó "patinando" y Tomini se adueñó de la punta. El tercer puesto era para Saladino y más atrás se escalonaban Leonardo Camelli, Jorge Hernalz, Juan Manuel Trasarti y Emilio Cimolai.
Así transitaron los primeros cuatro giros, pero al final de la recta y antes de entrar en la zona de los mixtos, Tomini entró desacomodado y allí le sacó la vanguardia Cáceres.
No hubo mayores alternativas hasta la décima vuelta. En la undécima, en el retome, Saladino le metió el auto a Tomini y se quedó con el puesto de escolta, pero los dos autos salieron heridos en sus cubiertas. A Saladino se le "bajó" la trasera derecha y a Tomini la trasera izquierda, ambos entraron a cambiar a boxes y perdieron todas las chances.
Esa circunstancia dejó a Cáceres muy solo en la punta y por eso pudo regular la marcha de su Chevy en los seis giros que restaban.
A partir de ese momento las posiciones se estabilizaron con Camelli en el segundo puesto, Hernalz tercero, Trasarti cuarto y el campeón Cimolai quinto. Más atrás Raúl Favre sólo quería sumar en el campeonato; Luis Urrutia y Omar Barros peleaban por llegar y Néstor Quintana, ganador del repechaje, completaba un buen trabajo porque largó desde muy atrás.
Cáceres y su equipo completaron un fin de semana perfecto. El centenariense vuelve, como en cada temporada, a demostrar que tiene auto y capacidad para quedarse por el título. ¿Se le dará en el 2003?

El título, entre ceja y ceja

CENTENARIO (AN).- Amplia sonrisa, abrazos con los miembros del equipo que le dedican muchas horas al auto y palabras de agradecimiento para los que lo apoyan, conformaban el panorama que acompañaba a Rubén Cáceres en el parque cerrado.
"Quiero dejar el 2", expresó cuando se le hizo notar que estaba en la punta del campeonato.
Cáceres no es ajeno a la lucha por el título en el TC Neuquino, pero hasta ahora nunca se le dio, por eso este año es casi una obsesión.
Al analizar la carrera dijo que "el auto patinó más de la cuenta en la largada, por eso Andrés (Tomini) se fue adelante. Después lo pasé bien y mi ritmo fue muy bueno".
La pelea entre los que escoltaban lo benefició para marcar diferencias.
"Siempre te viene bárbaro cuando los de atrás se complican, pero igual mi coche estaba para ganar sin problemas", finalizó.
Leo Camelli hizo una carrera muy pareja, no se enrredó con nadie y cuando se desgranó la fila se encontró con un merecido segundo lugar.
"Nos equivocamos con la libras de las gomas y al final el auto estaba inmanejable, pero igual rindió como esperábamos. Estos puntos nos vienen muy bien para el campeonato", comentó tras la prueba.

Cortaron 1.500 entradas, pero entró el doble de gente

CENTENARIO (AN).- Una vez más el público le respondió al TC Neuquino en Centenario. La multitud que acompañó a la categoría fue estimada en más de 3.000 personas y el clima de una de las categorías más importante del automovilismo regional fue el ideal.
La gente del AACC cortó más de 1.500 entradas y se presume que una cifra similar ingresó sin pasar por los controles, para no dejar ningún sector del circuito sin cubrir. El perímetro de los 2.200 metros de trazado no tuvo claros al momento de correrse las tres finales que cerraron el espectáculo.

• El cepillo: Cayetano "Nino" Saladino fue uno de los primeros que apeló a la escoba para limpiar el cajón de largada donde se ubica el auto que pilotea su hijo Pablo. Durante mucho tiempo recibió más de una cargada por su accionar, pero ayer fue evidente que le aparecieron varios imitadores y fueron muchos los mecánicos que le pasaron al cepillo para las ruedas no patinen al momento de la largada. "El diablo sabe por diablo, pero más sabe por viejo".

• Mal fin de semana: Para el equipo que comanda Alfredo Dupouy no fue un buen fin de semana en la "Colonia", porque los tres autos que presentó tuvieron problemas.
El de Gastón y el de Eduardo Carbia, rompieron la caja de cambios y el de Sebastián Márquez, que venía de ganar en Zapala, tuvo problemas de distribución y fundió motor.

   
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