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Integrantes de grupos piqueteros festejaron "el poco apoyo del pueblo a los políticos".
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BUENOS AIRES (DyN).- Los movimientos piqueteros Barrios de Pie e Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJP) intentaron ayer capitalizar la abstención y el escaso respaldo popular conseguido por los candidatos mejor posicionados en las elecciones.
Pese a las amenazas de que podrían producirse trastornos para los votantes por sus manifestaciones, los militantes de las dos organizaciones protestaron en el centro porteño después de terminado el comicio y con los primeros resultados a boca de urna ya circulando por los medios periodísticos.
El epicentro de las protestas fue el obelisco, donde se concentraron algunos centenares de militantes para repudiar las elecciones que se llevaron a cabo en todo el país y que por primera vez terminarán en un ballottage, hasta anoche entre Carlos Menem y Néstor Kirchner.
"Uno o dos de cada diez"
"Por primera vez en la historia el pueblo votó contra los políticos, porque sólo uno o dos de cada diez ciudadanos ha votado a algún candidato", señaló el titular del MIJP, Raúl Castells, al pie del obelisco.
"Fue claro el mensaje de la gente que repudió a un ex presidente y ex funcionarios cuando fueron a votar", dijo Castells, en referencia al momento que debió superar Fernando de la Rúa y varios funcionarios cuando concurrieron a las urnas (ver recuadros).
Por su parte, el Movimiento Barrios de Pie también participó de las protestas, con una concentración en la fábrica textil Brukman y una frustrada marcha al Cabildo, que debió culminar en la Plaza de la República, en la que está emplazado el símbolo de la ciudad de Buenos Aires.
El referente de esta agrupación, Jorge Ceballos, aseguró que el objetivo de las movilizaciones fue "dejar un mensaje a la sociedad de que no tenemos que discutir quién va a ser collar de la dependencia, sino la posibilidad de construir un país independiente".
Ceballos aseguró que las manifestaciones se llevaron a cabo para repudiar las elecciones presidenciales porque, a su juicio, "cualquiera (de los candidatos) que gane llevará al país a continuar con la dependencia y el modelo neoliberal".
La concentración en el obelisco -a pocas cuadras de donde estaba instalado Carlos Menem- comenzó pasadas las 18 y finalizó pasadas las 21, lapso en el cual un fuerte operativo policial controló que no se produjeran desbordes.
"Sólo una o dos personas de cada diez van a apoyar al candidato que gane estas elecciones. Por eso, el vencedor no tendrá posibilidad de aplicar ningún tipo de políticas totalitarias, represivas y hambreadoras", concluyó Castells.
Varios funcionarios y postulantes de distintos partidos, no ocultaron su temor de que se produjeran incidentes durante la marcha piquetera que estaba prevista.
"Eligieron un mal día. No es bueno que una movilización de este tipo se produzca en pleno recuento de votos de una elección a presidente", aseguraron.
Sin embargo, el grupo que se concentró no fue tan grande como se pensaba, y no se registraron incidentes.
Integrantes de Quebracho increparon a López Murphy
BUENOS AIRES (DyN).- El candidato presidencial de Recrear, Ricardo López Murphy, fue insultado ayer duramente por miembros de la agrupación Quebracho en el momento de emitir su voto en un colegio de la localidad bonaerense de Adrogué, agresión que fue replicada por el aspirante quien señaló que no les tenía "miedo" a los manifestantes.
"Hay gente que es intolerante, hay que gente que no admite que se ejerza el derecho a votar en libertad, hay gente que quiere usar la prepotencia y la violencia para impedir que los argentinos ejerzan su libertad", se ofuscó el postulante, quien fue calificado de "vendepatria" por los integrantes de Quebracho.
López Murphy fue sorprendido por los insultos en momentos en que se disponía a ingresar al cuarto oscuro de la mesa número 18 del Colegio Irlandés, en Estrada 151, de Adrogué, al sur del conurbano bonaerense, donde votó antes de las 9.30. "Yo les quiero decir a ellos que no les tengo miedo, lo he demostrado una y mil veces", dijo instantes después a los periodistas que cubrían el acontecimiento.
El ex ministro de Defensa y Economía de la Alianza, de 52 años, añadió: "Yo espero que las fuerzas electorales aseguren que esos elementos que vienen a impedir a los ciudadanos ejercer su derecho en el comicio, no prevalezcan sobre los que creemos en la libertad".
Tras los momentos de tensión y una vez emitido su sufragio, el postulante del Movimiento Federal Recrear se retiró del establecimiento señalando que pasaría el resto de la jornada en su casa de esa localidad.
Luego del ataque verbal contra el candidato, la policía informó que no se detuvo a ninguno de los manifestantes del grupo Quebracho.
Fuentes de la Jefatura Departamental de Lomas de Zamora confirmaron que tras los incidentes, en los que los manifestantes insultaron y tildaron de "vendepatria" al ex funcionario delarruista, se retiró por la fuerza a los integrantes de Quebracho, pero no se produjeron detenciones.Los manifestantes fueron alejados de la escuela por los policías de la comisaría Primera de Adrogué, que se encontraban de guardia en el lugar.
Le arrojaron panfletos a Scioli
BUENOS AIRES (Télam).- El candidato a vicepresidente por el Frente para la Victoria, Daniel Scioli, votó ayer en una escuela del barrio porteño de Balvanera, donde sufrió un escrache por parte de un grupo de militantes de la agrupación Quebracho. El incidente no pasó a mayores, ya que los militantes sólo lo insultaron y le arrojaron volantes con la consigna "Que se vayan todos".
El compañero de fórmula del santacruceño Néstor Kirchner votó pasadas las 10.15 en la mesa 3.952 del primer piso de la escuela número 24 "Provincia de Catamarca", ubicada en Jean Jaures 870, donde arribó acompañado de su mujer, la ex modelo y empresaria Karina Rabollini y su hija Lorena de 24 años.
Cuando se retiraba caminando hasta su casa, en la puerta de la escuela un grupo de 15 militantes de la agrupación Quebracho lo escracharon -al igual que hicieron con el candidato Ricardo López Murphy-, con insultos y arrojando panfletos con las consignas "Que se vayan todos" y "Gane quien gane, pierde el pueblo".
El ex motonauta no fue agredido y se retiró caminando y custodiado por dos efectivos policiales, a su casa de Anchorena al 600.
Respecto al escrache, Scioli aseguró que no se lo esperaba pero que le da "más confianza y ganas de trabajar que nunca. Mi actitud es la de todos los días, salgo caminando de mi casa y vuelvo caminando", dijo Scioli.
De la Rúa fue blanco de insultos e ironías
BUENOS AIRES (DyN).- El ex presidente Fernando de la Rúa recibió fuertes insultos e ironías en el lugar donde emitió su sufragio, una escuela del barrio La Recoleta, de la que fue sacado literalmente "en el aire" por una veintena de custodios.
El ex mandatario votó exactamente a las 15.57, en medio de apretujones que protagonizaron sus custodios para evitar que tanto público, como periodistas, camarógrafos y fotógrafos pudieran acercársele. No obstante la requisitoria de los hombres de prensa, De la Rúa se mantuvo impertérrito sin contestar ninguna de las preguntas que se le hicieron, ni tampoco las ironías y los insultos de parte del público.
Sin embargo, se dio tiempo para saludar a unas pocas personas que le extendieron la mano. Fueron los menos, ya que a medida que se supo que De la Rúa estaba en el lugar, el clima en contra del ex presidente fue ganando terreno.
"¿Lo espera el helicóptero afuera?", le preguntó alguien cuando se acercó a la mesa número 4.996, una de las 18 dispuestas en el Colegio Domingo Faustino Sarmiento, de Libertad al 1.200, donde también figuraban en el padrón sus dos hijos varones, Aíto y Antonio.
A primera hora de la mañana cuando la guardia periodística aguardaba a De la Rúa, justamente un helicóptero que sobrevoló el lugar motivó más de un comentario irónico que recordaron los últimos momentos del ex presidente en la Casa Rosada, en los calientes días de diciembre de 2001.
El ex jefe del Estado llegó a las 15.55 a bordo de un automóvil de gran porte, gris metalizado. Se especulaba que De la Rúa iría a votar a primera hora del día, para evitar aglomeraciones, pero eligió ir recién bordeando las 4 de la tarde.
Además de los segundos que estuvo en el cuarto oscuro, apenas pudo transitar unos pasos tranquilo por un pasillo de la escuela. Allí De la Rúa, en todo momento con rostro serio, caminó con paso seguro, siempre rodeado de custodios, que impidieron a los periodistas acercarse. Vestía saco azul, camisa clara con pañuelo anudado al cuello, pero fue perdiendo elegancia cuando a metros de llegar a la puerta de la escuela, los custodios lo sacaron casi "en el aire" en momentos en que los insultos y apretujones fueron tomando más virulencia.
"Traidor, seguro que votaste a (Ricardo) López Murphy", le gritó un presunto militante radical, mientras otro le reprochaba: "te escapaste como una rata".
Siete minutos después de haber llegado, De la Rúa fue metido en el lujoso auto que raudamente dejó el lugar. |
