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Martes 4 de marzo de 2003 | ||
Indefinición por una banca del Concejo entre UCR y MPN |
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El emepenismo podría sumar cinco concejales. Al final, Quiroga se impuso por casi 9 puntos. |
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Cuando faltaban escrutar sólo dos mesas, una de una de una escuela del centro de la ciudad y otra de un barrio, la Justicia Electoral informó que el MPN estaba alcanzando las cinco bancas, en tanto que la UCR sumaba hasta el momento tres nuevos ediles. "Río Negro", como el resto de los medios de prensa, publicó ayer el resultado parcial del escrutinio que indicaba que uno y otro partido se habían adjudicado cuatro bancas. El restante le corresponde -en eso no hubo modificaciones- al Partido Justicialista. Sin embargo, cuando se llegó al 99% de las mesas se comenzó a atribuir un quinto concejal al emepenista Nerio Navarrete, a expensas de la cuarta radical, Gladys Patricia Varela. Con todo, los apoderados de Unión por Neuquén (UCR, PJ y MID), señalaron que "no está dicha la última palabra" y que aguardan con expectativa los resultados de las mesas faltantes. "Por otro lado -dijeron-, hemos planteado una serie de cuestiones referidas a votos recurridos. En este caso se trata de alrededor de 300 votos en juego que, según el criterio que siga la Justicia, puede significar que aseguremos un cuarto concejal y consecuentemente que el MPN pierda uno", dijo José Gerez, apoderado de UCR. Desde la Junta Electoral, en tanto, se limitaron a reconocer que falta escrutar dos mesas y que los cómputos respectivos recién se conocerán hoy. "Nosotros estamos atentos a esas dos mesas, a los votos recurridos y, además, al recuento final del escrutinio. Teniendo en cuenta que la diferencia es muy baja -se habla de 80 a 100 votos-, preferimos esperar el veredicto final", dijo Fabián Pelliza, concejal electo de la UCR. Con las cifras prácticamente definitivas, Quiroga aventajó en 8,72 puntos a Brollo. Ayer, con 474 mesas escrutadas sobre un total de 476 habilitadas, el intendente obtuvo su pasaje a la reelección con 44.779 votos contra 36.458 del candidato emepenista. Cuando sólo faltaban computar dos mesas, lo que no cambiará los porcentajes en lo que se refiere a intendente, Quiroga había obtenido el 46,89% de los sufragios, contra el 38,17% de Brollo. Esta vez Quiroga aventajó al MPN por una diferencia más modesta que los 14,6 puntos que obtuvo en septiembre del "99, cuando accedió a la intendencia de la mano de la Alianza. En esa oportunidad, el candidado concitó el 49,81% de los votos contra el 35,21% del emepenista Luis Manganaro. Votó el 71,3% del padrón y los votos en blanco, que sumados a los nulos fueron la estrella de las elecciones nacionales de octubre de 2001, y que en los comicios de septiembre del "99 ya habían alcanzado el número de 15.000, esta vez se derrumbaron. Alcanzaron sólo a 2.600. El partido más votado fue el MPN, que obtuvo 36.458 sufragios (36,36%), contra 31.650 (31,56%) de la UCR. El hecho le sirvió a los referentes sobischistas para intentar relativizar el impacto de la derrota experimentada. Aseguraron que el MPN, como partido, había "ganado las elecciones". En realidad, Quiroga ganó bien, pero con el apoyo del Partido Justicialista, del MID y los felipistas del MPN, en el marco del acuerdo frentista denominado Encuentro Neuquino. Los peronistas le proporcionaron 8.804 sufragios y el desarrollismo 4.325. La suma le permitió al intendente superar en casi 9 puntos a su principal adversario. Es difícil precisar qué boleta eligieron los simpatizantes de Felipe Sapag para votar a Quiroga. Una fuente de ese sector reveló que se les dio a elegir entre las del PJ y del MID. En las últimas internas de febrero pasado, el justicialismo contaba 8.900 afiliados en la capital provincial. O bien el peronismo votó disciplinadamente o bien algunos felipistas optaron por esa boleta para castigar a Sobisch. En el caso del MID, el número de votos superó el promedio de esa fuerza, lo que hace pensar que el fenómeno anterior se dio allí con mayor intensidad. Una fuente del Quiroguismo reveló que el sector de Felipe Sapag eligió ese expediente para que se pudiera sopesar su contribución al triunfo del intendente. Desde el peronismo, una fuente admitió que la fuga hacia el MPN puede haber sido de 1.000 o 1.500 votos a lo sumo, pero advirtió que la verdadera contribución de ese partido a Quiroga no se limitó a los 8.804 votos sino que se engrosó con los sufragios que le restó al candidato del gobierno provincial. Aunque nadie lo admitió oficialmente, el menemismo contribuyó a llevar agua para el molino de Brollo. La alianza de Sobisch con Carlos Menem es pública y una fuente cercana a la conducción del PJ dio por hecho el "empujoncito" de ese sector. La elección del domingo dejó en claro también que las diferencias en el seno de la ex Alianza entre el Frente Grande y el ARI, que impidieron a esos sectores presentar batalla con una sola lista, resultó a la postre perjudicial para ambas fuerzas políticas de centro izquierda. Betty Kreitman, la candidata del ARI, sólo alcanzó un 4,46% de los votos y David Lugones, de Encuentro Neuquino, un nucleamiento que incluye al Frente Grande, radicales disidentes, el sector del PJ que lidera Oscar Parrilli y el Partido Socialista, sólo alcanzó el 2,72% de los sufragios. Ni uno ni otro lograron acceder a una banca. Jesús Escobar, del Frente de los Trabajadores y el Pueblo sumó 3.798 votos (3,98%) ubicándose apenas por encima de Lugones y un poco por debajo de Kreitman. Pero en los hechos tampoco logró arañar un escaño en el Deliberante. Como ocurrió con el caso anterior, la suerte de la izquierda hubiera mejorado sensiblemente de haberse producido alguna forma de unidad con el Partido Obrero, que fue con Izquierda Unida y cuya candidata Angélica Lagunas, sólo obtuvo el 2,28% de los sufragios. |
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