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Ya habían advertido desmanejo en las subcontrataciones

Investigación:

Julio Rajneri,
Adrián Pecollo,
Javier Lojo e Italo Pisani

Altec, en la ruta del soborno

La empresa estatal de tecnología usa su ventaja en obtener contratos sin licitación para cederlos a terceros, como Tecno Acción, violando la ley. Así, sospechosamente no gana dinero pero los terceros sí. Y es de Tecno Acción de donde salieron los cheques que cobró el dueño de tres casinos rionegrinos para destinar a sobornos a dos altos funcionarios, tal como él mismo confesó. Altec le cedió a esa firma un generoso contrato del negocio de la quiniela por más de cuatro millones de pesos. Hoy, la primera parte de la investigación.

La investigación judicial acerca de los cheques al portador librados por Tecno Acción S.A. en favor de "acreedores" sospechosos, ha tenido un avance decisivo al rescatarse del Banco Galicia los originales que prueban la existencia de esos pagos que hasta ahora no tienen ninguna justificación medianamente convincente, lo que robustece la impresión de que se trata, en definitiva, de retornos ilegales por determinados favores otorgados por funcionarios corruptos.
Pero para que esta, hasta ahora, fuerte presunción tenga sentido, hace falta un eslabón importante.
¿Porqué razón una empresa privada pagaría coimas a funcionarios de un gobierno con el que no tiene relación directa?
"Río Negro" investigó esta relación, buscando el hilo conductor que permita deducir cuál es el beneficio que recibe la compañía privada y que explique el motivo para sobornar a quienes puedan tomar las decisiones.
La conclusión es definitiva. Tecno Acción obtiene importantes contratos de la administración pública provincial sin licitación. Entre ellos el más importante, el de la Lotería por poco más de cuatro millones de pesos anuales. Y lo hace amparado por un régimen aparentemente legal que le permite quedarse con éste y otros contratos, con la posibilidad de fijar arbitrariamente el costo de las prestaciones.
Para ello cuenta con un aliado indispensable: la empresa barilochense Altec, sociedad del Estado, condición que le permite adjudicarse contratos en forma directa, vale decir sin licitación.
En una palabra, Altec -que está bajo la órbita del ministerio de Economía- obtiene directamente los contratos, supuestamente porque también posee el desarrollo tecnológico para cumplirlo, pero luego actuando como empresa privada los transfiere a otra firma, ésta de capital privado, claro que sin permitir la oferta de otros competidores como lo haría cualquier compañía interesada en obtener la mejor calidad y el mejor precio. Así ocurre en el 93 por ciento de sus contrataciones, lo que la convierte en una discreta pantalla para brillantes negocios particulares y, como es fácil deducir, para abrir el peligroso y ancho camino de la corrupción.
El hecho de que una empresa de alta tecnología, con 210 personas ocupadas que incluye a científicos e investigadores, transfiere casi todos sus trabajos calificados a otras contratistas privadas es muy llamativo, sobre todo en el caso de Tecno Acción, empresa que en apariencia hace lo mismo: con 86 empleados, desarrolla "softwares" de juego y parquímetros. Ambas tienen "cerebros" y el prestigio suficiente para llevar adelante bienes, procesos y servicios informáticos. No son pocos los que tienen un enorme grado de confusión acerca del papel de una y otra. Es más, creen que se trata de la misma firma porque hasta comparten instalaciones.
Tecno Acción, radicada también en Bariloche nació y creció en el vientre de Altec, pero una vez privatizada -adquirida por una corporación financiera- fue creciendo en volúmenes de facturación (15 millones anuales y una utilidad neta de casi un millón) y ramificando sus servicios de desarrollo de sistemas y programas de automatización de apuestas, de estacionamiento medido, expendio de pasajes y otras soluciones informáticas.
Por el contrario, Altec casi no gana dinero pese al millonario volumen que factura, como se verá más adelante.
Una de las claves de la expansión de Tecno Acción es justamente la estrechísima relación que tiene Lotería de Río Negro como subcontratista de Altec.
Como se señaló en la reciente investigación de este diario, Tecno Acción fue la que libró los cheques al portador que luego endosó y cobró Carlos "Cacho" Ferrari, el dueño de tres casinos de Río Negro. Este empresario se ufanó, no sólo de pagar un soborno de un millón de dólares para quedarse con los casinos, sino también de colaborar hasta hace poco en el cobro de coimas mensuales de 50.080 pesos destinadas a dos altos funcionarios rionegrinos, en cheques desdoblados para no llamar la atención. La Justicia rionegrina acaba de obtener las pruebas de estos pagos provenientes de Tecno Acción y también de una empresa "sello" llamada Edificom.

Generosidad a terceros

Altec (Alta Tecnología) fue creada por un decreto del ex gobernador Osvaldo Alvarez Guerrero el 15 de enero de 1985. No obstante es a partir del gobierno de Horacio Massaccesi que empieza a crecer cuando la empresa consigue monopolizar la provisión de servicios de informatización en el Estado provincial.
Tiene un presidente que ostenta el récord de permanencia: 13 años. Guillermo Enrique Campbell se caracteriza por un perfil extremadamente bajo y un patrimonio nada desdeñable que incluye, además de bienes inmuebles, a las empresas Trans Jet SRL y Transporte Andino, entre otras, así como una emisora FM en la ciudad andina.
Altec se refugia un régimen supuestamente legal basado en decretos y leyes nacionales y provinciales para obtener sin licitación contratos directos con el Estado no sólo dentro de la provincia sino en todo el país. Es decir, elude a sus anchas y sin el mínimo control un requisito fundamental para la competitividad y, sobre todo, la transparencia de los dineros públicos.
¿Por qué supuestamente legal? La ley autoriza al gobierno a contratar directamente con una empresa del Estado, con lo cual es esa empresa estatal la que debe ejecutar los trabajos. Pero si la firma que recibe sin licitación la obra, la transfiere a otra, aquí ya se viola la ley. Un ejemplo: cuando el gobierno rionegrino le adjudica a Vialidad provincial la realización de un asfalto es Vialidad la que tiene que hacer la obra. Si la subcontratara sin licitación violaría la ley.
Altec, al ceder casi todos los negocios que consigue a empresas privadas por contratación directa no sólo viola lay ley, sino que pone de manifiesto una sospechosa vocación por no ganar dinero. Altec llega a facturar más de 14 millones (2001), aunque las utilidades apenas rondan el 1%. Por si fuera poco, se reserva parte de los riesgos.
Los balances así lo reflejan. En su memoria anual del 2000, Altec explicó que la facturación creció un 16 por ciento con relación a 1999, pero la ganancia neta fue del 1,1 por ciento.
Las ventas de la empresa en el 2000 sumaron 12.034.152,68 pesos por productos informáticos, servicios prestados y estacionamiento medido. A esos ingresos se le deben restar los costos de las prestaciones (que generalmente son pagos a las empresas subconcesionarias), lo cual arroja 690.367,42 pesos de "utilidad" pero el resultado operativo de Altec se reduce a 65.278 pesos después de deducir los gastos de comercialización y administración, lo que equivale al 0,54 por ciento de los más de 12 millones facturados.
El registro del balance 2000 incrementará la "ganancia" a 124.418,79 pesos -algo más de 1 por ciento- recién cuando se incorporan las "rentas de valores mobiliarios" y "otros ingresos diversos" de Altec.
Las obras obtenidas y en ejecución por Altec incluyen proyectos públicos en Río Negro y una decena de servicios extraprovinciales con Neuquén, la municipalidad de Bahía Blanca, la Universidad de Buenos Aires, la Corte Suprema de Justicia y los Estados de Córdoba, La Rioja, Corrientes y Catamarca, además de la comuna bahiense.
En cada uno de estos casos Altec subcontrata. La lista de subcontratistas es tan amplia en función de todos los frentes sobre los que hoy trabaja la empresa rionegrina, que hasta al mismo Campbell le cuesta recordarlas.
La única comuna que intentó frenar el contrato con Altec para el negocio del estacionamiento pago y medido fue Neuquén. Como se recordará, en la gestión Jalil el ex asesor Fermín Temi dijo sin rodeos: "Detrás de Altec está Tecno Acción, firma que a la postre contrata en forma directa con los distintos organismos públicos de las provincias". Pero finalmente el actual intendente dio vía libre a la contratación.
En los demás territorios del interior también Altec tiene prioridad porque es una firma del Estado que se encuentra dentro de los términos de la Ley 5.720/72 que permite la contratación directa entre organismos y empresas públicas.
En definitiva, la imbricada relación entre Altec, Tecno Acción y Lotería de Río Negro es la más evidente demostración de cómo hay dinero que fluye sin el mínimo control.
El balance del 2000 de Lotería da la magnitud del negocio que involucra a estas tres hebras de la misma madeja. Consigna "gastos por servicios sistematizados por quiniela" por nada menos que 4.132.754,22 pesos. Y la mayor parte se la lleva Tecno Acción. Esta firma tiene a Altec como una de las principales de fuentes de ingreso (el 26 por ciento de su facturación total).
Una tentadora caja bien resguardada y el resquicio ideal para el pago de favores.

Monopolio en la provisión de computadoras

Altec creció en su facturación favorecida por el Decreto Ley nacional 5720/72 pero también el provincial 1.724 del 10 de noviembre de 1993 a partir del cual monopoliza los servicios informáticos. Es decir que la administración pública y empresas del Estado de Río Negro se vieron obligadas a contratar los sistemas fabricados por Altec. Todavía hoy se observan muchas computadoras de Altec en los organismos del Estado.
En mayo del 2000, el decreto 480 incorporó a la empresa en una comisión técnica de evaluación y autorización de cualquier contratación en ese sentido. En realidad, algunas áreas del Estado pudieron sortear esa norma con el argumento de que los costos de Altec eran excesivos respecto de los precios del mercado.

Foto 1: Guillermo Campbell: todo un récord al frente de la empresa estatal.

Foto 2: Altec, una empresa que da trabajo a 210 personas, muchas de ellas de alta calificación técnica. Depende directamente del ministro de Economía. Sin embargo, la laxitud de controles es sorprendente.

Foto 3: Tecno Acción tiene su central en Buenos Aires, pero en Bariloche posee un edificio y comparte talleres con Altec. Nació de Altec, y hoy recibe una generosa porción de los contratos de la empresa estatal rionegrina. De Tecno Acción salieron los cheques que cobró Ferrari.