Viernes 22 de marzo de 2002

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Recién dentro detres meses podría haber un acuerdo con el FMI

 

Lo dijo O"Neill tras reunirse con Remes Lenicov. Ese lapso puede ser una eternidad para el gobierno. Duhalde pidió comprensión a los líderes mundiales.

  MONTERREY (México).- Después del mensaje lapidario lanzado el miércoles por Estados Unidos y el FMI, el secretario del Tesoro norteamericano, Paul O` Neill, le soltó un poco la soga al gobierno de Duhalde. "Dentro de los próximos tres meses puede existir una esperanza para que esto realmente se arregle", deslizó ayer el funcionario.
Pero para la actual situación argentina, tres meses no son una esperanza sino la eternidad. Más aún cuando el dólar no encuentra su techo y las reservas del Banco Central se desangran día a día intentado controlar la estampida de la moneda norteamericana.
Hasta la continuidad de Duhalde sería un tema de total incertidumbre cuando se pretende planificar a 90 días y sin la inyección estabilizadora de los desembolsos externos. Pero también hay que resaltar que por ese camino el país ya destruyó el blindaje financiero y el megacanje, anunciados en su momento como la salvación final.
Ayer, la situación económica no mejoró en el país. El dólar volvió a cerrar a 2,60 pesos con una intervención del Central en el orden de los 100 millones de dólares. Las colas de desesperados ahorristas buscando la moneda norteamericana para preservar sus ahorros fue una constante en la City y las principales ciudades del interior. Varias casas de cambio se quedaron sin stock para vender.


Esfuerzos en varios frentes

El gobierno nacional salió a desplegar ayer sus acciones en la cumbre de la ONU en Monterrey para tratar de torcer las críticas opiniones sobre el manejo de la situación en la Argentina.
Desde bien temprano, el presidente Duhalde avaló los dichos de Bush y el FMI referidos a que no habrá ayuda para el país si no se aplica un drástico ajuste. "Los organismos internacionales se manejan de manera lógica porque un país que no cumplió con sus compromisos no genera confianza".
De todos modos, y al referirse a los planteos que le hará hoy al titular del Fondo, Horst Köhler, Duhalde indicó que "vamos a insistir en que hemos elegido un camino distinto, ya que la Argentina fue apoyada en los últimos 5 años cuando no tenía un plan sustentable y hoy se requiere lo que se debe haber requerido por cinco años", aseveró.
En Buenos Aires, los funcionarios sintonizaron rápidamente los dichos del presidente. El viceministro de Económica, Todesca admitió que "en la Argentina no hay conciencia de la profundidad de la crisis".
En otro frente de las negociaciones en Monterrey, Remes Lenicov intentó convencer al secretario del Tesoro norteamericano, Paul O`Neill.
Ambos coincidieron en la conveniencia de "encontrar un marco de diálogo y negociación con el FMI". O´Neill aseguró que "salí con un sentimiento muy claro de que hay un entendimiento de lo que hay que hacer y una dedicación para tomar los pasos para lograrlo".
"Estoy muy esperanzado de que estemos hablando en términos de perspectivas de corto plazo y con eso quiero decir probablemente hablando de semanas, posiblemente no más que unos pocos meses", para alcanzar condiciones para reanudar los créditos a Argentina, dijo.
Por otra parte, y durante el discurso que pronunció en la conferencia internacional ante más de 50 líderes mundiales, Duhalde reclamó "comprensión y colaboración de la comunidad internacional" para que la Argentina pueda salir de la crisis.
Dijo que "para cambiar hemos decidido terminar con el desorden fiscal que asociado con un desafortunado régimen monetario y cambiario nos condujo a la más grande depresión de la que se tenga memoria".
El jefe de Estado aclaró que "no venimos a pedir compasión sino un nuevo contexto global" y, en ese sentido, pidió que las naciones más poderosas pongan fin al proteccionismo.
(DYN, Reuters y AR)

Köhler: "No hay remedio milagroso"

Monterrey.- La solución para la crisis argentina está en manos de los argentinos y no existe un "remedio milagroso", aseguró ayer en Monterrey el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Horst Köhler, aunque aseguró que el organismo continúa trabajando con el país y se han dado pasos en la dirección correcta.
"No hay nadie en Argentina o en el FMI que piense que existe un remedio milagroso para salir de la crisis", afirmó Köhler durante una rueda de prensa.
De todos modos, Köhler destacó que "el FMI está muy comprometido y continuará su trabajo con Argentina" y aseguró que se "han dado primeros pasos en la buena dirección".
Por su parte, la vicedirectora gerente del Fondo, Anne Krueger, afirmó ayer en Moscú que dentro de dos semanas el organismo financiero estaría dispuesto a reanudar las negociaciones con el gobierno argentino.

Foto: Duhalde dio un desesperado mensaje a los líderes mundiales para que apuren la ayuda.

     
     
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