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una esperanza

El desempleo será uno de los saldos de los saqueos

Luis Sahores, dueño de la cadena Topsy, agradeció la solidaridad de los vecinos. Los trabajadores comprometieron su ayuda en la reconstrucción de la firma.

NEUQUEN (AN).- El hombre de canoso está parado junto a la línea de cajas. Los vidrios están tapados, el salón llenísimo, y la gente le ofrece ayuda. Luis María Sahores -el dueño de la cadena Topsy-Bomba- está allí saludando a todos, con una sonrisa que parece pintada. Le preocupa "tener muchos desocupados".
Es un escenario extraño el que presenta el supermercado Topsy de la avenida San Juan, la sucursal número 1 de una cadena que hasta el lunes aglutinaba a 35 locales. Hay policías preparados para una guerra, dentro y fuera del negocio. Hay gente con palos y cachiporras en la vereda, en la calle que está cortada, en la playa de estacionamiento y hasta en las esquinas. Hay nervios y hay bronca. Y también posturas cargadas de prejuicios que rozan los extremos. Es que en el particular cuadro que pintaron los saqueos, cualquier cara desconocida se transforma en sospechosa. Los vecinos de esa parte del centro de Neuquén aseguran que defenderán su mercado a como de lugar. Los empleados, además de proteger lo que queda, dicen estar dispuestos a "aguantar" los meses que sea necesario para recuperar su fuente laboral.
Fabiana Figueroa, una cajera de la sucursal del barrio Gregorio Alvarez, está desesperada.
Dice que no pudo contener la bronca y que lloró cuando los saqueadores reventaron el local, del que no quedó absolutamente nada. Ni los inodoros ni las canillas. La chica de 21 años quiere ayudar y no sabe cómo: "hago el aguante, quiero volver a trabajar", le dijo a este diario. El caos del martes y el miércoles sembró paranoia sobre todo a la gente ligada Topsy. Y hay terror de que en cualquier momento haya nuevos intentos de saqueo.
"¿Vienen? ¿Están por venir?" -preguntan algunas empleadas de la sucursal 1 a los clientes que a su vez retransmiten la pregunta a otros clientes o bien a los policías o a los gendarmes de uniformes desteñidos que tienen palos parecidos a los que portan los vecinos.
"Nunca pensé que podía pasar algo así, nunca lo pensé...", admite Sahores el empresario supermercadista más exitoso made in Neuquén. Desde que fundó el primer Topsy hace 23 años la cadena que incluye a los Bomba se consolidó en lugares -en el centro y en los barrios- y se mantuvo a pesar del masivo desembarco de los hipermercados.
"No hay que dramatizar, esto no es lo peor que puede pasar: hay cosas peores", sostuvo el empresario de 63 años en diálogo con "Río Negro".
¿Qué piensa hacer?
-Vamos a seguir, no sé cómo pero vamos a seguir. Tenemos 30 y pico de locales, nos rompieron diez, nos quedan más de veinte -contestó al tiempo que se le caía un gesto amable para una señora que ensayaba un saludo que más bien parecía un pésame.
¿Pudo dormir anoche?
-Sí, caí fusilado, estaba muerto...estuvimos hasta tarde, la gente se quedó toda la noche.
¿Qué es lo que más le preocupa?
-Que ahora tengo muchos desocupados ¿Recorrieron algo? -invirtió los roles el empresario.
"Estuvimos en el local del barrio Gregorio Alvarez" -contestó el periodista.
-¿Y cómo está? -siguió preguntando Sahores.
"No quedaron ni las rejas, las estaban amurando"-prosiguió el hombre de prensa. El gobierno ya anunció que habrá un fondo de reparación para sus locales.
-No sabía, no he hablado con nadie del gobierno, vamos a ver que pasa.
¿Qué fue lo que más le dolió?
-Que había muchos vecinos, que en muchos casos era la gente de enfrente la que se llevaba las cosas. Y además, que ahora tengo muchos desocupados.
¿Qué piensa del abrazo solidario y del apoyo de los vecinos?
-Es impresionante.
¿Entonces va a seguir?
-Vamos a ver. Nadie sabe lo que puede llegar a pasar. Nunca pensé que podía pasar algo así.

Hubo casi 150 detenidos

NEUQUEN (AN).- Casi 150 personas permanecían detenidas ayer al mediodía por los violentos incidentes ocurridos entre miércoles y jueves, cuando centenares de manifestantes tomaron por asalto varios comercios de la ciudad para saquearlos. La mayoría irá recuperando su libertad, pero medio centenar está en una situación más comprometida y seguirá bajo arresto.
Las fiscalías penales anunciaron que trabajarán mañana para recibir denuncias de víctimas de los saqueos y de abusos policiales. Quienes tengan alguna presentación para realizar deben concurrir a la fiscalía general, ubicada en Yrigoyen al 100.
Los 149 detenidos por la Policía en los graves enfrentamientos de miércoles y jueves están alojados en ocho comisarías de esta capital y Centenario. Muchos fueron notificados del inicio de una causa penal en su contra y recuperaron su libertad con rapidez. "En aquellos casos en que consideramos que hay pruebas suficientes, pedimos la detención", explicó el fiscal de Delitos Complejos, Alejandro Cabral. No quiere decir que seguirán presos indefinidamente ya que son delitos excarcelables, pero tendrán que pedir expresamente que los liberen.

Foto: Uno de los locales de la cadena Topsy-Bomba que resultaron arrasados por los saqueos.