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Viernes 21 de diciembre de 2001 | |
Refriegas en saqueo a La Anónima en Viedma |
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Miles de vecinos de barrios pobres sustrajeron alimentos de la mayor sucursal de la firma en la capital rionegrina |
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| VIEDMA (AV).- Un saqueo sufrió ayer la mayor sucursal de La Anónima en esta capital. Los enfrentamientos entre policías y vecinos ocasionaron nueve heridos. Un joven de 23 años perdió un ojo -aparentemente- por una bala de goma. Cuatro son uniformados, entre ellos, el subcomisario Andrés Ruiz, con un cuadro de hipertensión. También se registraron varios detenidos por el robo de garrafas en un corralón vecino. Tras un interminable refriega de policías con cientos de jóvenes de los barrios pobres, más de un millar de vecinos lograron después retirar alimentos de la mencionada sucursal de calle Alvaro Barros. En el inicio de la tarde se movilizó un grupo de desocupados a partir de una marcha de la UTD local y se concentró frente a esa filial de La Anónima a la espera que les entregue alimentos. Al demorarse ese operativo, se sumaron cientos de nuevos vecinos y comenzaron las refriegas con la Policía, como también, las roturas de vidrios sobre la avenida Alvaro Barros. Las ansiedades hicieron crisis, con lo cual la Policía disparó las primeras granadas de gases lacrimógenos. Los efectivos con apoyo del grupo BORA se hicieron fuertes sobre la avenida dispersando a los manifestantes, quienes respondían con piedras. Con las primeras refriegas aparecieron en la escena la defensora del Pueblo, Nilda Nervi, el diputado del Frente Grande, Eduardo Chironi, y la secretaria de Desarrollo Social del municipio, Alicia Carbone. Sus esfuerzos fueron infructuosos en controlar la situación y distribuir un millar de bolsas de alimentos propuestas por La Anónima aunque la solicitud de los desocupados fue de 2.500 unidades. Las refriegas se extendieron por casi una hora, y al ver los manifestantes que no podían acercarse al edificio, tomaron dos volquetes con los cuales los arrastraron hacia las cercanías del edificio para escudarse de las balas de goma y los gases lacrimógenos. No obstante, ese lugar fue ganado por una decena de integrantes del grupo BORA que por varios minutos fueron rodeados bajo una intensa lluvia de piedras. Por su parte, un numeroso grupo de mujeres que pugnaba por conseguir una bolsa comenzó a gritar e insultar a la Policía desde O"Higgins, una de las laterales que da a la playa de estacionamiento del supermercado. Las mujeres fueron apoyadas por vecinos, activistas gremiales y de agrupaciones de izquierda, lo que elevó la tensión en el lugar. Esto descolocó a un efectivo que recibió un piedrazo, ya que se vieron rodeados, y disparó su arma cargada con balas de goma. Otros efectivos lo siguieron disparando gases lacrimógenos. Por unos minutos se temió lo peor: algunos adolescentes ingresaron a un corralón donde se llenan garrafas, y arrojaron un envase abierto a los policías. En un momento, un pequeño grupo ingresó al local que tenía la mayoría de los ventanales rotos. Sólo pudieron retirar algunos productos porque reprimió el BORA. |
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