MAS INFORMACION
Cavallo les pidió "comprensión" a los acreedores
Banqueros mostraron optimismo ante el debut del canje de deuda. Dijo que si todos se suman, se ahorrarán 3.700 millones. Reconoció que las cuentas del 2001 tendrán un desfasaje.
"Quiero pedirle comprensión y participación a la comunidad financiera local. La confianza de los argentinos nos va a permitir conseguir la confianza del mundo", dijo el ministro.
Durante su discurso el ministro trazó los lineamientos del presupuesto para el año 2002 y dijo que "será un año de gran sacrificio para los argentinos". Proyectó ingresos por 42.120,5 millones de pesos y gastos por igual cifra, producto de erogaciones primarias por 35.120,5 millones y pagos de intereses por 7.000 millones. Dijo que se mantendrán los recortes en sueldos y jubilaciones y la reducción de las partidas de las transferencias a las provincias.
El jefe del Palacio de Hacienda formuló el pedido durante un discurso que ofreció en el Banco Nación ante banqueros y financistas del país en el que además presentó las condiciones para el canje de deuda provincial.
El ministro remarcó que "no habrá recursos adicionales para financiar déficit público" y anunció que el lunes arribará al país una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) para completar la revisión del programa.
No obstante, reconoció que las cuentas públicas durante el 2001 tendrán un "pequeño desfasaje" respecto a la pauta de 6.500 millones de déficit comprometida con el FMI, pero, según opinó, "no será problema".
Del resultado de esta visita dependerá la decisión del organismo de habilitar el desembolso de 1.264 millones previstos para diciembre y necesarios para cerrar el trimestre cumpliendo con la regla de déficit cero.
"Es natural que sigan analizando la sustentabilidad fiscal" porque "tantas veces la Argentina prometió reducciones de gasto que luego no cumplió", sostuvo Cavallo, justificando los requerimientos de información adicional.
Cavallo dijo que está "convencido" que la Argentina logrará el apoyo de los tenedores de títulos porque "la alternativa es peor para los argentinos y para los acreedores".
"La comunidad internacional entiende que la Argentina no puede pagar altas tasas de interés, pero una tasa del 7% es razonable para un país en crecimiento", señaló el funcionario.
Añadió que "no podemos ilusionarnos con cuestiones mágicas. El crecimiento va a llegar sólo si cumplimos con la ley de déficit cero, porque así volverá el crédito hacia el sector privado".
El ministro pronosticó que en caso de que el cien por ciento de los acreedores acepte el canje, el ahorro de la Nación será de unos 3.700 millones de dólares, que se ampliaría a 5.000 millones si se suman las deudas provinciales.
Cavallo defendió la estrategia de la operación (en dos fases) y sostuvo que era "necesario" primero poner a salvo a los bancos, fondos de inversión y AFJP locales de la "inestabilidad" que existirá en el mercado de bonos durante el tiempo que dure la reestructuración.
El jefe de Hacienda reiteró que no habrá garantías adicionales para el "swap" y reconoció que para los acreedores externos no resultan "valiosos" los avales que la Argentina pueda otorgar.
Dijo que en la fase II del canje "seguramente" se darán títulos a cambio, en lugar de préstamos garantizados como en la fase I y entendió que despertará interés porque una "tasa del 7%" es posible pagar y porque se respetarán las jurisdicciones para eventuales reclamos judiciales.
Respecto a las cuentas fiscales del año 2001, Cavallo aseguró que el canje permitirá algún tipo de ahorro durante el último bimestre debido a que el trueque se realizará con valores al 6 de noviembre.
Presupuesto con poda de 7.500 millones
El proyecto de Presupuesto 2002 incluye una poda de gastos de 7.525,7 millones de pesos en el gasto respecto de la ejecución estimada para el corriente año, anunció ayer el ministro de Economía, Domingo Cavallo.
De ese total, 3.687,1 millones de pesos corresponderán al ahorro que se espera realizar en pago de intereses de deuda tras el canje de deuda, con lo que la baja a obtener vía la continuidad de los recortes de jubilaciones y salarios, las reducciones en coparticipación y en partidas presupuestarias llegará a 3.838,6 millones de pesos.
Si se toma en cuenta no las partidas que se estima serán efectivamente ejecutadas hasta fin de año sino las cifras del Presupuesto 2001, el recorte en gastos alcanza los 8.926,7 millones de pesos.
En materia de recursos, el proyecto oficial, cuyo detalle será presentado al Congreso en los próximos días, prevé para 2002 una suba de 297,7 millones de pesos respecto a los estimados para 2001, que alcanzaron los 41.822,8 millones de pesos.
En cuanto al pago de intereses de deuda, se estima una reducción de 3.687,1 millones de pesos, por efecto del canje de deuda pública. De esta manera, con recursos casi estables y la reducción prevista en intereses, el recorte de gastos de 3.838,6 millones deberá pasar por salarios y jubilaciones, coparticipación y partidas presupuestarias.
Cavallo ratificó ayer que durante 2002 continuará el recorte de 13% en jubilaciones y salarios estatales, así como la baja en pagos de coparticipación federal logradas tras los acuerdos alcanzados con gobernadores. (Infosic)
Presentaron canje de deuda provincial
Domingo Cavallo presentó formalmente ayer el canje de deuda provincial, que por su estructura obliga a cada jurisdicción a negociar con sus acreedores el ingreso a la operación.
La refinanciación de las deudas provinciales fue uno de los puntos que el Gobierno se comprometió a consensuar con los bancos, a cambio que los gobiernos locales acepten una rebaja en la coparticipación federal de impuestos.
Sin embargo a partir de cómo quedó estructurada la operación (presentación voluntaria al canje de títulos o préstamos), el beneficio será diferente para cada provincia y obligará a cada gobierno local a negociar con cada banco acreedor el ingreso los títulos en su poder al trueque. En su instrumentación el canje tiene similar estructura al "swap" de deuda soberana doméstica, con cambio de bonos por préstamos garantizados, en este caso avalados por el Fondo Fiduciario para Desarrollo Provincial (la garantía última es la coparticipación de impuestos), a una tasa de 7% anual.
La conversión se realizará al valor de los títulos al 6 de noviembre y se aceptarán propuestas hasta el 30 de noviembre de 2001. Cinco días después el Fondo Fiduciario anunciará el monto de las ofertas. (DYN)
Entrevista a Roberto Alemann: El ministro "debe corregir errores"
BUENOS AIRES (ABA) - El economista Roberto Alemann, consideró ayer que el ministro de Hacienda, Domingo Cavallo, "debe corregir todos los errores en los que viene insistiendo" para que el país pueda salir de la crisis, al tiempo que evaluó que "aún tiene margen para hacerlo".
Alemann recordó que cada una de las medidas que tomó Cavallo incrementaron la caída de los depósitos en el sistema bancario: "La introducción de la convertibilidad ampliada al euro, el factor de empalme, los planes de competitividad, cada uno de esos anuncios provocaron una merma de reservas que desde enero a la fecha suman 16.000 millones de dólares".
Por otra parte, el economista ortodoxo recordó que si bien el riesgo país es muy alto, aún está lejos de los tiempos de la hiperinflación cuando superó los 4000 puntos básicos.
El analista destacó que los planes de competitividad representan una baja en la recaudación anual de 2000 millones, agravado por el descuento del 5 % de IVA para pagos con tarjetas de débito. "La gente sabe sumar y restar, cuando advierte que el producto está cayendo 3 % y la recaudación un 16 % toma decisiones en base a esos datos", disparó. Como receta para la crisis, Alemann aconsejó "arreglar la deuda y cumplir a rajatabla el déficit cero, recaudando más y reduciendo los gastos". Responsabilizó del incumplimiento de esas metas a los gobiernos provinciales.
En tal sentido, apuntó que mientras Nación hizo un ajuste del 13 % en salarios y proveedores, así como un 30 % en los honorarios de los contratados, las provincias no lo hacen y además emiten bonos y reciben Lecop generando mayor endeudamiento". En cuanto a la cuestión de la deuda, subrayó la importancia de llegar a un arreglo mediante el canje al que calificó de voluntario. "Si fuera compulsivo entraríamos en default", explicó el consultor. Apuntó que cuando los tenedores de bonos consideran que es mejor venderlos incrementan el índice del riesgo país, e insistió en que "si se sigue licuando la recaudación no habrá interés en retener los títulos argentinos". Advirtió que la solución no es bajar impuestos, porque "el problema no pasa por la oferta sino por la demanda" (por lo que hay que reducir el déficit para que bajen las tasas y retorne el crédito).
Por último describió a la salida de Patricia Bullrich del gobierno como un elemento negativo más. "Bullrich se equivocó en el trámite -porque no se dirimen por la radio las diferencias en el gabinete-, pero tenía razón. Aunque la diferencia con los sindicatos tuvo su peso, el factor clave del conflicto fue su intención de unificar las cuentas sociales a lo que se resistieron los burócratas. Los radicales siempre le hacen caso a los burócratas", indicó.
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación
