Martes 20 de noviembre de 2001

MAS INFORMACION

Cavallo les pidió "comprensión" a los acreedores

 

Viene la misión del FMI y el gobierno ansía más fondos

 

Tras varios días de idas y vueltas por la desconfianza del organismo de crédito internacional ante los magros indicadores de la economía argentina, el presidente De la Rúa anunció que el lunes próximo desembarcará la misión técnica. Esperan que tras la evaluación aprueben el desembolso de 1.264 millones.

  Apremiado por los pésimos indicadores económicos y la necesidad de dar sustento político al crucial canje de deuda, el presidente Fernando De la Rúa anunció ayer que le pidió al director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Horst Köhler, que venga la misión de auditoria a esta capital y señaló que en principio llegaría el próximo lunes.
La urgencia del gobierno pasa por la definición del FMI acerca de si desembolsa o no los tramos pendientes de un crédito por 1.264 millones, ya que los necesita para afrontar vencimientos de deuda.
De la Rúa confió que se había comunicado telefónicamente con Köhler y que éste le había dicho que la misión llegaría el lunes 26 próximo para revisar las cuentas fiscales argentinas.
De esa forma, ante la intervención de la máxima autoridad nacional, el FMI accedió a flexibilizar su posición sobre la Argentina, ya que hasta el momento había desistido de mandar a sus técnicos hasta tener mayor información sobre los números del déficit fiscal.
La misma información fue proporcionada por el ministro de Economía, Domingo Cavallo, poco después en el encuentro con empresarios que mantuvo en el Banco Nación, donde explicó temas relacionados con el canje de deuda en el tramo local.
De la Rúa dijo que habló con Köhler y que le pidió que "venga la misión para que evalúe las cuentas y así poder acceder a los tramos pendientes" de crédito para la Argentina, unos 1.260 millones de dólares para fines de este mes.
El presidente dijo al ingresar a la Casa Rosada que el director gerente del FMI le anunció que "el lunes próximo estará la misión trabajando aquí".
El domingo, la número dos del organismo, Anne Krueger, había dicho en Ottawa, donde se llevó a cabo la Asamblea Anual del FMI y el Banco Mundial, que estaban tratando de lograr información para mandar la misión a Buenos Aires.
"No podemos desembolsar sin enviar una misión a la Argentina. Y debe regresar tras acordar con el Gobierno que se ha completado la revisión", dijo Krueger. La funcionaria agregó que "la situación actual es, sencillamente, que estamos tratando de obtener suficiente información para poder enviar una nueva misión".
De llegar el lunes, el grupo de técnicos del FMI deberá llevar adelante una tarea contra reloj para determinar si la Argentina incumplió con las metas fijadas y luego presentar el caso al Directorio.
Ante el crítico escenario que afronta, el gobierno ya habría solicitado el pasado fin de semana al Fondo un "waiver" (perdón) por el incumplimiento de las metas acordadas para poder recibir el desembolso de 1.260 millones de dólares pendiente para diciembre. (DYN/AR)

El riesgo país ya orilla los 3.000 puntos

Los mercados no dieron ayer señales de recuperación y, por el contrario, la nueva trepada del riesgo país a un nivel récord que orilló los 3.000 puntos conspiró una vez más en contra de las acciones y bonos en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires que cayó 1,16%.
Los expertos aseguran que el grado de adhesión que tenga la reestructuración de la deuda que se inició ayer será clave para descifrar el futuro inmediato de las variables financieras.
Los papeles líderes de la bolsa porteña bajaron 0,68% y entre los bonos globales, los que tienen vencimiento en el año 2008 retrocedieron 0,26%.
Pero lo que más preocupa a los inversores es la escalada del riesgo país, que parece no encontrar un techo. Según la medición de JP Morgan, el riesgo de invertir en la Argentina se elevó a la zona de los 2.961 puntos básicos.
El indicador más temido en los mercados refleja la sobretasa promedio que pagan los bonos argentinos de la deuda con respecto a valores similares de los Estados Unidos. El riesgo país de Rusia cuando se declaró en default (cesación de pagos) superó la barrera de los 3.400 puntos básicos.
Para los analistas, la misión argentina en Ottawa logró un cúmulo de apoyos políticos, pero ningún aporte contante y sonante.
"No se habló de acelerar el desembolso de los 1.270 millones de dólares programados para diciembre", apuntó un corredor de bolsa.
En medio de la extrema prudencia en que se mueven los operadores, los volúmenes en la bolsa porteña sumaron apenas 5 millones de pesos, al tiempo que las 36 empresas negociadas se distribuyeron finalmente en 19 alzas, 10 bajas y otras 7 firmas sin cambios.

Crecimiento del déficit y caída de la recaudación obligarían a más ajustes

A pesar de la política de déficit cero y las rebajas de jubilaciones y salarios estatales del 13%, el rojo de las cuentas nacionales excedería este año en más de 2.000 millones de pesos por encima de lo pautado.
El otro dato que pone contra las cuerdas al gobierno es la recaudación impositiva, ya que en noviembre sufriría una nueva reducción del 16% si continúa la tendencia mostrada durante la primera mitad del mes.
El ministro Cavallo, anunció ayer que el desequilibrio ascenderá este año a 7.823,4 millones, aunque señaló que esa cifra se atenuaría con la baja en el pago de intereses de deuda que provocará el canje de deuda iniciado ayer. Según analistas privados, el rojo llegará a los 8.000 millones contra los 6.500 pactos con el FMI.
Ante el desequilibrio, desfondadas las arcas estatales por la profundización de la recesión y la multiplicación de los intereses de la deuda, el gobierno se dispone a aplicar un fuerte recorte de 1.700 millones de pesos en las partidas presupuestarias hasta fin de año, de modo de asegurar el cumplimiento de los compromisos externos y no caer en cesación de pagos.
Del cumplimiento del déficit cero y de los pagos de deuda dependen los desembolsos del FMI pendientes del blindaje y su apoyo para progresar en el canje de deuda, operación a la que apeló el ministro Domingo Cavallo para desactivar la bomba de tiempo que significan los elevadísimos intereses de la deuda externa.
Contra los 6.500 millones de pesos de déficit comprometidos para 2001 con el FMI, al mes de octubre ya se alcanzó un rojo de 7.248,5 millones. Esto obligaría a que entre noviembre y diciembre se alcance un superávit de 748,5 millones, cifra que aparece imposible ante la fuerte crisis económica. Al respecto, Cavallo reconoció que habrá un desfasaje en el cuarto trimestre, pero remarcó que "va a ser pequeño".
De acuerdo a datos preliminares de fuentes de Economía, la recaudación de noviembre registraría una retracción de casi del 16%, lo que agudizaría la situación.
En este mismo mes, además, el Gobierno debe afrontar el vencimiento de títulos de deuda por 1.500 millones: de ahí la premura por obtener un adelanto de los desembolsos por 1.260 millones del FMI.
Según las mismas fuentes, los recortes que impondría el Gobierno hasta fin de año alcanzarían a 1.700 millones de pesos, afectando fondos de gasto social y educación. Las rebajas serían de 517 millones en las planes de empleo, salud y programas alimentarios; en el caso de Educación la reducción será de 260 millones, la mitad de la cual corresponde al presupuesto universitario. No se pagaría además la cuota del Fondo de Incentivo Docente (55 millones).

"La fuga de depósitos ya casi no existe"

BUENOS AIRES (ABA).- Los principales banqueros del país salieron ayer a poner paños fríos sobre las versiones que señalan una masiva fuga de depósitos y aseguraron que a pesar de que la salida de fondos no está del todo detenida, la tendencia disminuyó en los últimos días.
Según registros oficiales, desde enero hasta la fecha ya fueron retirados de los bancos un total de 16 mil millones, pero los especialistas estiman que el plan económico y el canje de deuda generaría un escenario positivo y podría poner fin definitivo al proceso. Así lo consideraron en diálogo con "Río Negro" el presidente del HSBC, Emilio Cárdenas, el titular del Banco de Boston, Manuel Sacerdote, y el director del Banco Bisel, Guillermo Harteneck.
"La fuga de depósitos ya casi no existe y pudimos comprobarlo de manera sensible en los últimos días", aseguró Sacerdote.
"Los inversionistas y ahorristas están comenzando a retomar la confianza. Los depósitos de los bancos están estables y no va a haber ninguna corrida", sostuvo el máximo referente del Boston.
Emilio Cárdenas, algo más cauto, dijo que "en nuestro banco no hay preocupación por el tema, porque estamos muy estables. Realizamos un monitoreo permanente del tema y no tenemos motivos para estar intranquilos", afirmó.
Por su parte, Hartenek, se mostró confiado en que el proceso se detendrá de forma definitiva cuando el plan comience a dar resultados.

   
    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación