Jueves 8 de noviembre de 2001

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La oposición avanza sobre la ciudad clave en el norte afgano

 

La Alianza del Norte, ayudada por las bombas de EE.UU., está en Mazar i Sharif. Washington quiere controlar esta región, que permitirá el despliegue de sus tropas.

  Kabul .- La opositora Alianza del Norte aseguró ayer haber tomado el poblado de Sholgera y encontrarse a las puertas de la estratégica ciudad de Mazar i Sharif, en el más importante avance sobre el terreno en el último año y medio, pero fuentes del gobierno talibán desmintieron el avance.
"Tomamos el distrito de Sholgera y esperamos llegar esta noche hasta las puertas de Mazar", declaró a la agencia France Press Mohammed Nadim, vocero de la facción tayica de la Alianza.
La información fue desmentida por el gobierno afgano, que señaló en un comunicado difundido por la agencia AIP que "las fuerzas de la oposición sólo tomaron en los dos últimos días el distrito de Zari" y que ellos conservan "el control total de Sholgera y Keshendeh".
Sin embargo, Nadim sostuvo que "algunos grupos rebeldes penetraron en los suburbios sur de la ciudad y están a sólo entre 5 y 7 kilómetros del centro, aunque el grueso de las tropas se encuentra a unos 60 kilómetros".
Según el vocero de las fuerzas opositoras, 3.100 soldados de la Alianza del Norte están combatiendo en el frente de Mazar bajo las órdenes de tres comandantes antitalibanes, el tayico Atta Mohammed, el uzbeco Abdul Rashid Dostum y Haji Muhaqiq, líder de la facción chiita Hazara.
Nadim informó que los avances de ayer quebraron distintos frentes talibanes que protegen Mazar y se impuso "un giro radical en el asedio" a esta estratégica ciudad del norte de Afganistán.

Una prioridad de EE.UU.

Los bombardeos norteamericanos de ayer se concentraron en los frentes sur de Mazar i Sharif, cerca de Taloqan -en la zona fronteriza con Tayikistán- y sobre la principal concentración de tropas afganas, 60 kilómetros al norte de Kabul.
Al menos cinco formaciones de aviones B-52 sobrevolaron el frente de combate, arrojando enormes explosivos individuales en la primera ronda y vapuleando luego las atrincheradas posiciones del Talibán con una serie de bombas más pequeñas, dijo el fotógrafo de Reuters Yannis Behrakis. "Han golpeado las posiciones adecuadas", dijo el comandante de la Alianza del Norte, Asil Khan, mientras observaba las incursiones, agregando que las aeronaves habían concentrado su fuego sobre combatientes árabes y paquistaníes en el frente de combate. Enormes columnas de humo se elevaron hacia el firmamento, mientras las fuerzas de la Alianza del Norte vitoreaban, desde sus puestos de observación, los ataques sobre los combatientes del Talibán.
La prioridad de Estados Unidos parece estar concentrada en perforar las líneas y permitir el avance de las fuerzas opositoras para hacerse con el control del norte afgano. De este modo, se podrían abrir líneas de abastecimiento desde Uzbekistán y Tayikistán antes del comienzo del invierno para preparar eventuales operaciones terrestres de tropas norteamericanas y de la Alianza en primavera.

Respaldo italiano

Al mismo tiempo, la Cámara de Diputados italiana aprobó ayer el envío de 2.800 soldados a Afganistán, para participar de la ofensiva militar que encabeza Estados Unidos en contra del gobierno afgano. La aeronáutica italiana desplegará entre ocho y diez aviones con un total de 300 hombres, la marina, con el portaaviones Garibaldi, aportará 1.400, mientras que las tropas de tierra superarán los mil efectivos.
(Reuters/Télam-SNI)

Temen que un vacío de poder derive en masacres étnicas

Naciones Unidas (EFE).- Una caída del régimen talibán en Afganistán puede provocar un vacío de poder en el que se produzcan matanzas, advirtió Kamal Hosain, relator especial de la ONU para los Derechos Humanos en Afganistán, en un informe publicado hoy.
"Ante una posible pérdida inminente de control por parte del régimen actual, han de adoptarse con la mayor urgencia ciertas medidas para evitar que se produzca un vacío" de poder, afirma el relator.
Hosain teme que "hombres, mujeres y niños puedan ver en peligro sus vidas y sus propiedades como consecuencia de la desaparición de la ley y el orden" y vaticina "posibles matanzas, como ha ocurrido en el pasado, cuando el territorio cambiaba de manos".
El relator indica que "a fin de reducir el temor y la inseguridad del público en general, así como la incertidumbre respecto del futuro, las Naciones Unidas deberían determinar, mediante amplias consultas con el pueblo afgano, los objetivos básicos que la comunidad internacional se propone alcanzar".
El relator propone desplegar dispositivos de seguridad interna y mecanismos provisionales que puedan entrar en funcionamiento en breve plazo y en los que participen los ciudadanos afganos.
Además, pide a "la coalición internacional que reconsidere la dirección de sus operaciones militares a fin de asegurar la estricta observancia de las normas del derecho internacional humanitario y demostrar que estas operaciones no están dirigidas contra el pueblo afgano".
Para que exista la percepción de que la ONU es una institución protectora y proveedora de ayuda, el relator recomienda "un nuevo despliegue del personal internacional de las Naciones Unidas, aunque con carácter voluntario".

Aatacó una base y fue abatido, en Qatar

BEIRUT (ANSA) - Un hombre de origen qatariota disparó ayer contra una base aérea en Qatar que utiliza la Fuerza Aérea estadounidense y, según algunas fuentes, hirió a tres norteamericanos, antes de ser abatido por agentes de seguridad de la base.
Lo informó ayer la agencia de Qatar QNA, según la cual "un ciudadano qatariota abrió fuego en la base Al-Adid y un guardia de seguridad respondió matando al agresor".
Aún hay dudas respecto a si el agresor hirió a algunos estadounidenses en la base aérea.
Un portavoz de la Embajada de Estados Unidos en Doha confirmó que "algunos estadounidenses resultaron heridos, aunque no podemos brindar mayor información porque el gobierno de Qatar está por emitir un comunicado", y es éste país "el que se ocupa de la seguridad". Pero por otra parte, un portavoz del Pentágono confirmó el ataque pero aseguró que ningún estadounidense resultó herido.
El Ministerio del Interior de Qatar identificó al atacante como Abdullah Mubarak Tashal al-Hajri, y dijo que se inició una investigación para determinar "el móvil del ataque".
La base de Al-Adid, situada a unos 40 kilómetros al sur de Doha, capital de Qatar, es utilizada por aviones militares estadounidenses gracias a un acuerdo de cooperación militar establecido entre ambos países el año pasado.
Aún no se confirmó si Estados Unidos está utilizando la base para sus operaciones militares sobre Afganistán.
     
     
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