La crisis es el resultado de más de 20 años de guerra, tres años de sequía y el desplazamiento constante de más de un millón de personas.	En las fotos, los niños en la frontera norte de Afganistán esperan por ayuda para sobrevivir.
Uno de cada dos niños afganos está desnutrido. En los campamentos se intenta brindar alimentación terapéutica, aunque la provisión escasea.	Durante los doce meses últimos nacieron más de un millón de niños afganos, y sus vidas se encuentran ahora en peligro. En la foto (arriba) Lala Bidal lleva a su hijo de cuatro años al hospital, al resultar herido tras un bombardeo.
Uno de cada cuatro niños corre el riesgo de morir de una enfermedad susceptible de prevención antes de cumplir cinco años. La imagen (izquierda), muestra a un pequeño que cruza en camión la frontera, hacia Pakistán.	El agua para el consumo es parte del paquete de asistencia, junto a medicinas y vacunas. Sin embargo, el Fondo de las Naciones para la Infancia dijo que necesita donaciones por más de 35 millones de dólares para ayudar a los niños.