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Somalia estaría en la mira de Bush
EE. UU. reorienta las pesquisas al exterior.
Era una prueba que los investigadores norteamericanos buscaban desde hacía años, pero que llegó recién el jueves, bajo la forma de una implícita reivindicación.
Estaba la mano de Osama ben Laden tras la "batalla de Mogadiscio" del 3 de octubre de 1993, el más intenso combate terrestre en que se vieron involucradas tropas norteamericanas desde los tiempos de Vietnam.
Tras 15 horas de batalla, Estados Unidos se encontró con 18 soldados muertos y más de 80 heridos. Los cuerpos de algunos militares norteamericanos fueron arrastrados por las calles de Mogadiscio por una multitud enfurecida.
"Estados Unidos comprenderá sus errores en Afganistán sólo después de que sus soldados sean arrastrados como en Somalia", dijo el jueves Atef, el egipcio conocido también como Abu Hafs al-Masri, que Estados Unidos considera el jefe militar de Al Qaeda.
Atef estuvo tras las masacres en las embajadas norteamericanas en Africa en 1998 -por las cuales se dictó el jueves la primera sentencia en Nueva York- y tal vez también es él la mente del ataque del 11 de septiembre.
Entre las 300 acusaciones contra Bin Laden y Al Qaeda en la base del proceso concluido en Nueva York, algunas se referían justamente a la batalla de Mogadiscio y el papel de Atef en el adiestramiento de las tribus somalíes para combatir a los militares norteamericanos de la operación "Devolver la esperanza".
Fuentes militares norteamericanas están haciendo circular con cada vez mayor insistencia informaciones sobre posibles ataques en Somalía, en campos de adiestramiento y objetivos vinculados a Al Qaeda.
Mientras tanto, los investigadores estadounidenses giraron su atención en la pesquisa sobre los atentados del 11 de septiembre hacia el exterior, a medida que disminuyen las posibles pistas dentro del país, dijo el viernes un funcionario de justicia federal.
"Se han acabado las posibles pistas en la investigación en Estados Unidos", dijo el funcionario. "El mayor foco de atención está girando hacia el extranjero, donde todavía se investigan posibles pistas". Hasta el jueves, 803 personas habían sido arrestadas o detenidas en Estados Unidos en relación con la investigación, dijeron funcionarios del Departamento de Justicia.
Desactivan bomba en Filadelfia
Filadelfia (EE. UU.) (EFE).- La policía ha encontrado un maletín con un potente explosivo de tipo militar en la estación de autobuses de Filadelfia, según han confirmado fuentes de este cuerpo.
El director de la policía de la capital de Pensilvania, John Timoney, identificó el explosivo como C-4, que ha sido retirado por artificieros de ese Cuerpo.
Según los primeros análisis, el maletín, encontrado en uno de los casilleros de la consigna, contenía entre 100 y 200 gramos de este tipo de explosivo, así como varios centenares de metros de cable.
En el maletín no se ha encontrado ningún detonador, por lo que la posibilidad de que hubiera explotado es muy baja, afirmó Timotey.
Sin embargo, afirmó que el explosivo encontrado era suficiente para volar toda la estación de autobuses, que pertenece a la empresa Greyhound.
"Si hubiera estallado, habría volado toda la terminal", dijo el sargento Roland Lee, un portavoz de la policía de Filadelfia.
Los investigadores buscan huellas dactilares o rastros de material genético en el interior del maletín.
Según las investigaciones realizadas hasta el momento, el maletín fue introducido en uno de los casilleros y cerrado con seguro el pasado 29 de setiembre.
Hasta ahora, no se ha confirmado si estos explosivos guardan relación con los actos terroristas del pasado 11 de setiembre.
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