Jueves 4 de octubre de 2001

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De la Rúa salió a descartar una devaluación

 

La Bolsa se derrumbó un 7,02%

 

El riesgo país se elevó a un nivel récord: 1.757 puntos básicos

  En un clima enrarecido por los indicadores económicos negativos, rumores de todo tipo, tensión internacional y la proximidad de las elecciones, los mercados domésticos cayeron ayer hasta fijar nuevos mínimos históricos, mientras el riesgo país voló hasta 1.757 puntos básicos, un nivel récord.
La Argentina volvió así al segundo lugar en la lista de países emergentes con mayor riesgo para la inversión financiera, detrás de Nigeria.
La Bolsa de Comercio de Buenos Aires perdió 7,02%, perforando el piso del martes de 4,34%. Los bonos retrocedieron 1,93%. Al tiempo, que las tasas interbancarias treparon de nuevo.
"Estamos cerca de la definición de crack", dijo un operador.
Añadió que los precios que se observan son similares a los que se esperaban en un cuadro de devaluación o cesación de pagos, a lo que se añade un complejo panorama político que presiona sobre el plan económico del ministro Domingo Cavallo.
El presidente De la Rúa calificó ayer de "disparate" una versión según la cual habrá una devaluación de la moneda argentina después de las elecciones del 14 de octubre.
De esa forma, la plaza doméstica no compartió la tónica de sus referentes. El Dow Jones aumentó 1,85% y el NASDAQ 5,93%. En cambio, el IBEX madrileño bajó 0,89% aplastado por el panorama argentino.
En este contexto, el riesgo soberano trepó 12 en comparación al martes.
El "call money" volvió a repuntar. "Está subiendo más de lo esperado para un principio de mes", recalcó Agustín Galvalisi, gerente de Inversiones del Societé Generale.
"Sucede que se observa una merma en el ingreso de depósitos. Este hecho se detecta desde hace un par de días", acotó.
Por eso, la tasa interbancaria aumentó a 14% en pesos a un día. Los dólares oscilaron entre 11 y 14%.

El riesgo de default sigue presente

En lo que va del año, la cotización de las acciones líderes de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cayó a la mitad de su valor inicial.
Si la comparación se realiza con los 866 puntos que llegó a anotar el Merval hace cuatro años, antes de que comenzara a derrumbarse tras el efecto de la crisis del Sudeste Asiático, la diferencia es más que estrepitosa: los modestísimos 214 puntos de ayer tendrían que aumentar más del 300% para alcanzar aquel nivel.
Cualquier otra relación sería igualmente ilustrativa de la caída libre de las cotizaciones, que alcanzaron los niveles más bajos en los 10 años y medio de Convertibilidad.
En coincidencia con ese descenso, el riesgo país tocó los 1757 puntos básicos, en una muestra inequívoca del retiro de la confianza de inversores del país y el exterior hacia la política -no sólo la económica- de un Gobierno que no deja de transmitir confusión e inseguridad.
A pesar de que Cavallo se desviva por hacer más atractivos los títulos de la deuda, a pesar de que el país esté cubierto en su financiamiento para los 12 meses venideros, la percepción en el mercado por el eterno riesgo del default sigue presente. (DYN)
   
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